1954.
Oficialmente se dice que la época de mayor
emigración a Venezuela fue la década de los años cincuenta, y en especial para
el canario que tuvo motivaciones especiales, terminada la Guerra Civil de los españoles (1936-39). Comenzó la Segunda Guerra
Europea, y terminada ésta, el bloqueo impuesto a Franco por las naciones
vencedoras. Consecuencia de la marginación, se vivieron años trágicos y de
incertidumbre en el Archipiélago y la válvula de escape, como tantas veces en
épocas anteriores fue ir más allá, a la promisora Venezuela. El descubrimiento
del petróleo, los nuevos precios obtenidos a través de países Exportadores de
Petróleo (OPEP) y el optimismo que se
respiraba en el país con un futuro prometedor, llevó una ingente cantidad de
canarios a la tierra de Bolívar, que apenas tenía un siglo de independencia y
fue meta de ilusiones y lugar donde se rehabilitó el isleño en trabajo e
incluso hasta en fortuna, que si bien no era cuantiosa, fue la base de un
progreso muy perceptible en Canarias con las ayudas del flujo de divisas a los
familiares. Este hecho se notó en un resurgir de la industria de la
construcción y en la reparación y mejoras de las viejas instalaciones agrícolas
y viviendas. La década de los 40 había sido de difícil y acuciante salida de
Canarias, problemas para obtener pasaportes y visados, imposibilidad de
contratos... se superaron con la emigración clandestina. Casi sin documentos,
hacinados en velero de corta eslora, forjaron las odiseas más increíbles de la
emigración canaria. Las estadísticas señalan que en el año 1954 llegaron a
Venezuela 74.000 emigrantes oficialmente, pero esa cifra era rebasada por los
canarios que no iban contratados, sino como transeúntes, turistas o como
simples visitantes y se quedaban en el país junto a padres y familiares, nacionalizándose
para tener derecho al establecimiento comercial e industrial. Se cifró en
aquellos años en más de 150.000 los canarios dispersos en todo el país hermano.
La mejoría de Canarias y de España en la década de los 70, estimuló el retorno
de muchos residentes de años en Venezuela, que se mostraba como un país sin los
avances de décadas anteriores. Un descalabro económico sufrido a principios de
los años 80 motivado por la devaluación de la moneda, colmó la incertidumbre
del país más próspero de América. [...]
(Juan S. Henríquez González, en: Mgar.net)
No hay comentarios:
Publicar un comentario