Sorprendido quedo como canario al
leer en este prestigioso diario provincial un artículo titulado "Lazos con
las islas", que firma José Antonio Cebrián Latasa, que seguro no es
natural de estas islas ni siquiera arraigado a ellas, el que tampoco parece
historiador, lo que unido a sus anteriores publicaciones sobre el tema —que al
parecer le resulta molesto, cual es el poblamiento humano en la prehistoria de
Canarias—, nos hace pensar en cierto resentimiento con sus argumentaciones
mitológicas y de pretendido acercamiento histórico pero que más bien parecen
extraídas de novelas de beduinos escritas por europeos. Es realmente bochornoso
que en uso de la libertad de prensa, por otro lado encomiable, se produzca tal
cúmulo de aberraciones a la filosofía de la historia que un mismo Herodoto o un
Plinio se avergonzarían de ello, porque a este pseudohistoriador "no hay
por donde cogerlo con su argumentación sin hilo, ni contexto y total falta de
rigor científico o probatorio".
Sobre el origen étnico y
procedencia de los pueblos aborígenes en estas islas, pueblo este pacífico y
valiente hasta su asentamiento definitivo, casi todas las teorías serias son
coincidentes en los siguientes postulados:
A) Desde la formación geológica
del mar Mediterráneo —Tetis— hasta época protohistórica, el estrecho de
Gibraltar, nunca sellado, impidió la comunicación del hombre europeo con
Afinca, hasta época protohistórica, aunque ahora se pretendan ver yacimientos
arqueológicos del Paleolítico inferior, de afinidad cultural con África.
B) La paulatina retirada de los
hielos durante el periodo cuaternario, hacia el norte, junto con la fauna que
alimentaba al hombre prehistórico —20.000 a 10.000 a.C.—, éste fue obligado a
continuar su obligada emigración hacia el sur a la búsqueda de lugares de
asentamiento más seguros, y así los arqueólogos ingleses excavan numerosas sepulturas
en Palestina, Monte Carmelo, con individuos de rasgos cromagnoides procedentes
del norte de África —los sumerios, camitas o semitas no eran cromagnoides—.
C) Estas migraciones desde Europa se polarizan
en aquellos lugares idóneos para la vida —Próximo Oriente o Creciente Fértil
Mesopotamia, donde tiene lugar la mayor revolución de la Historia (protohistoria)
con asentamientos estables y la aparición de la agricultura y ganadería hacia
el 10.000 ? 8.000 a.C.—
y D) Posteriormente, ya durante
el 7° a 4° milenio a.C., se produce una paulatina desecación de estas zonas,
hoy desérticas, por aumento paulatino de las temperaturas que alcanzan el norte
de África, Sahara y el Atlas, con la paralela desaparición de "la fauna, a
excepción de la domesticada, así como de la vegetación o flora, que se hallaba
compuesta, curiosamente, por el bosque de laurisilva que aún se conserva en
nuestras islas —por condicionamientos climáticos más favorables— según estudios
de restos fósiles en el Magreb.
Por todas estas circunstancias,
restos de aquella raza cromagnoidea continúan sus desplazamientos obligados a
la búsqueda de mejores lugares de asentamiento y a lo lar-
Ranero
"Lazos coloniales con las
islas" Miguel Leal Cruz, en: Diario de Avisos.
(Archivo personal de Eduardo
Pedro García Rodríguez)
El turismo en Tenerife
Gilberto ALEMÁN
El turista que visitaba
históricamente el archipiélago canario venía en busca de recuperar su salud. La
suavidad del clima, la pureza del aire, la paz social, atraían a los europeos
desde que Humboíd descubriera este mundo aparte a pocos días de la Europa fría e inhóspita.
La tranquilidad del valle de La Orotava, que sirvió de
marco a una novela de Julio Verne, atrajo a los viajeros, especialmente
ingleses que buscaban el marco ideal para la recuperación de su salud.
Los tinerfeños tuvieron muchos
trabajos para crear una infraestructura turística: El puerto de La Orotava sirvió de marco
para la construcción del hotel "Taoro", que tuvo serios problemas a
finales del siglo pasado como consecuencia de alguna epidemia isleña. Santa
Cruz no quería quedarse atrás, y el hotel "Quisisana" fue un ejemplo
que se desmoronó como consecuencia de la guerra del
14.
Don Luis Camacho, que fue suegro
del ensayista y escritor Domingo Pérez Minik, vino de Madeira, y además de
enseñamos a comer con cubiertos de pescado? puso en marcha diversas
realizaciones para hacer de nuestro turismo una actividad progresista. Dotó al
puerto de lanchas para el traslado de los viajeros, creó un hotel en Santa
Cruz, fundó una empresa para el transporte de turistas por carretera, inició
sus actividades en Tacoronte y fundó, junto con sus hijos, la primera agencia
de viajes de la isla.
Luego vinieron otros tiempos. En
la década de los sesenta se inicia un "boom" turístico que abre perspectivas
insospechadas no sólo en el Puerto de la Cruz sino en otras localidades isleñas. Fueron
tiempos de paradores, de miradores, de kodak, de camisas de flores...
La ya tradicional preocupación
turística del Cabildo Insular se intensifica. Todos parecen estar de acuerdo:
hay que dar a los turistas instalaciones adecuadas para su uso y disfrute. Pero
la especulación rápida motivó a ciertas iniciativas a movilizar la construcción
de hoteles, de apartamentos, de instalaciones comerciales. Se olvidaron nuestros
promotores de buscar otros alicientes para nuestros visitantes.
Miguel Zerolo, el actual
consejero de Turismo, lo sabe bien. Lo dijo el otro día. El turista necesita
algo más que el cemento de los edificios.
go de la cordillera del Atlas, y
así encontramos el tipo Mecha EJ Arbi, que según varios textos antropológicos y
de la UNED,
"se asimila al tipo europeo Combe Capelle, rama de Cromagnon, de aspecto
erguido, alto, dolicocéfalo y de mayoría de cabello rubio, que contrasta con la
raza pura iberomediterranoidea, de tez oscura, baja estatura, bra-quicéfala, o
mesocéfala que son los habitantes originarios de la Península Ibérica
e islas deí Mediterráneo.
En este deambular por el norte de
África, estos pueblos de procedencia en parte europea son a quienes se atribuye
el primitivo poblamiento de las islas Canarias, hasta donde arribaron desde la
costa africana, en almadías y con mar en calma, entre los 5000 á 3000 años
antes de Cristo, según don Telesforo Bravo, en el transcurso del tercer
milenio, donde ya se había inventado la vela, que era de uso común en todo el
mar Mediterráneo, teoría también avalada por J. Berthelon y E. Chantre.
¿Dónde puede estar entonces la
diferencia con otros grupos étnicos de nuestro entorno geográfico? En cuanto a
los negroides subsaharianos, no hay duda, sí puede haber relación con grupos
magrebíes ya que esta zona constituyó el camino obligatorio de llegada, y en
cuanto a la población de la Península Ibérica, le remito al libro
"Morphologíe des races humaines", de M. Marker y J. Deniker, Alianza
Editorial, que dividen a laTaza mediterránea en: iberoinsular, de baja
estatura, tez oscura, braquicéfala con antecedentes neandertaloides, que son
los habitantes, según los autores, originarios de Iberia y la
atlante-mediterránea, de tez más clara, ojos azules, rubios en alto porcentaje
como Mecha El Arbi, o tipos de árabe puro.delgados y de altura superior a 1,80
metros, que ocupaban desde Asia Menor, Palestina, Egipto y norte de África
hasta el Atlas, por ser itinerario obligatorio de origen claramente europeo, de
donde procede sin ningún género de dudas nuestra raza guanche, hoy ya muy
"mesturada", que confirma el estudio de la doctora Falkemburker,
relativamente reciente, en el Museo del Hombre de Las Palmas, sobre esqueletos
guanches presumibles, identificando tipos de esta raza en una proporción
superior al 40%, mediterranoides 30% y resto mixtos, que igualmente corrobora
Millares Torres con objetividad confirmada que textualmente apunta: "El
tipo rubio y alto dominante en Canarias al emprenderse la conquista en el siglo
XV, es el mismo que había llegado a Libia desde Egipto-Cáucaso, posibles
invasiones de pueblos llamados "del mar", posteriormente, y antes
obligados por los crudísimos fríos de la Era Glacial. Por todo
ello, deduzco las siguientes conclusiones, que creo más objetivas y sumamente
razonadas y más ajustadas a la ética histórica, que usted parece olvidar:
Primero.- La raza guanche, aún
dominante antropométricamente en estas islas —estudios probados—, a pesar del
mestizaje sufrido es álín en gran proporción a la denominada cromagnon de
origen centroeuropéo-cáucaso — una rama aria pasó al Indostán— sin perjuicio de
las alteraciones que toda raza antigua conlleva, en su llegada hasta las islas
en sucesivas migraciones —desde el Paleolítico superior posiblemente— hasta
periodos protohistóricos o propiamente históricos, a través de Anatolia,
corredor palestino, y el Magreb, donde existen restos arqueológicos de este
paso, probados.
Segundo.- Consecuentemente a ello
es raza de estatura superior a las etnias de nuestro entorno, como lo prueban
igualmente los citados estudios científicos, y las propias medidas
antropométricas que se efectúan en los centros de reclutamiento como
consecuencia del llamamiento de canarios al servicio militar, aspecto
cuantificable que se mantiene invariablemente cada año.
Señor Latasa: explíquenos con más
claridad quiénes fueron los "funkhu" y cite más bibliografía y hechos
demostrables; de lo contrario, me obliga a pensar que sus relatos son extraídos
de una novela de beduinos de Tombuctú-Níger, de escritores aventureros del
siglo pasado y, sin embargo, "parece usted brillante", pero le falta
"algo y rigor". Consulte.
«Historiador universitario (UNED)
2/OPINION, DIARIO DE AVISOS
(Archivo personal de Eduardo
Pedro García Rodríguez)
No hay comentarios:
Publicar un comentario