martes, 10 de junio de 2014

ANTONIO ESTANISLAO TORRES





1832 agosto 18.
Falleció en su domicilio de Arico el Nuevo   Antonio Estanislao Torres (1749-1832), labrador, teniente capitán de Milicias, promotor de la independencia de Fasnia, primer sindico personero de su Ayuntamiento, apoderado del mismo,l. mayordomo de la ermita y de la fabrica parroquial de San Joaquin, y donante del solar de la iglesia1

Nuestro biografiado no limitó su existencia a desempeñar su empleo de teniente de Milicias y a cuidar sus considerables propiedades agrícolas, sino que desplegó una intensa actividad pública  en  su  pueblo adoptivo, Fasnia, donde ejerció  como  mayordomo de  la antigua ermita de San Joaquín. Luego actuó como principal instigador en la creación de la parroquia y en la segregación de este Ayuntamiento del de Arico. Aquí recibió el título de mayordomo de fábrica de la nueva iglesia parroquial, para la que donó parte del solar e hizo una imposición perpetua de aceite para la lámpara del Santísimo Sacramento. Además, fue elegido comisario elector y primer síndico personero de la localidad, cargo para el que fue reelegido en varias ocasiones, así como apoderado de Fasnia en el Cabildo general de La Orotava. Una vez viudo, regresó a su Arico natal, donde falleció.

Teniente capitán de Milicias 2

Nació en Arico el Nuevo el 7 de mayo de 1749, siendo hijo del capitán de milicias don Diego Antonio de Torres y de doña Paula de Morales. El 14 de ese mismo mes en fue bautizado la iglesia parroquial de San Juan Bautista por el presbítero don Carlos de Morales, con licencia de don Marcos Antonio Peraza, cura servidor de la misma; se le puso por nombre “Diego Antonio Estanislao” y actuó como padrino el alférez don Esteban de Morales, vecino de dicho lugar.

Creció en el seno de una familia de militares, pues su tatarabuelo, don García de Vera (?-1675), fue alférez de Milicias; su bisabuelo, don Juan García de Vera (1615-1695), capitán de Milicias; su abuelo, don Diego de Torres Vera (1654-1712), alférez de Milicias; su padre, don Diego Antonio de Torres  (1711-1779), capitán de Milicias y alcalde de Arico; y su hermano:  don  Juan  Antonio de  Torres  (1747-1815),  capitán  de  Milicias  graduado  de Infantería, alcalde y síndico personero de Arico.

Siguiendo la tradición militar de la familia, y como hijo de capitán, don Diego entró a servir en el Regimiento de Milicias Provinciales de Abona, en la clase de subteniente, en virtud de Real Despacho dado en palacio a 20 de junio de 1771 por don Carlos III; contaba 22 años de edad.

Como tal oficial, el día 3 de noviembre de 1773, a los 24 años de edad, contrajo matrimonio en la iglesia de San Juan Bautista de Arico con doña Bárbara Petra González de Llarena,  hija  del  teniente  don  Bartolomé  Delgado  Mejías  y  de  doña  Bárbara  González Llarena, naturales y vecinos de Fasnia; los casó el cura párroco de don José Nicolás de Valladares, tras ser dispensados de un 3º con 4º grado de consanguinidad, actuando como testigos don Carlos de Morales, “alcalde deste lugar”, don Bartolomé Mexías “el menor” y doña Brígida Pérez, de la misma vecindad. Se velaron en la misma parroquia el 26 de enero de 1774. La nueva pareja se estableció en Fasnia, en el bello caserío del Camino Real que era propiedad de la familia de doña Bárbara, conocida como la “Casa de los Mejías”.

Mediante otro Real Despacho, dado en palacio a 8 de agosto de 1777 por el mencionado Rey don Carlos III, don Diego de Torres ascendió a teniente capitán de la 4ª Compañía del Regimiento de Milicias Provinciales de Abona, destino en el que continuó hasta su retiro.

Gracias al padrón de 1779 que se conserva en el archivo de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife, podemos conocer la situación de esta familia, que vivía en la casa nº 1 de Fasnia; de los datos incluidos, se desprende que don Diego era el personaje más culto, acomodado y respetado de Fasnia:

Casa del Thente. Capn. Dn. Diego Anto. Stanislao Thorrs.
Dn. Diego Antonio Stanislao Thorres. Casado. su edad 30 as. sabe leer. escrivir. es de buena lus. su oficio Labrador pasa con buena comodidad.
Da.  Barbara  Petra  de Morales  su mugr. su edad  26 as.  atiende  al  oficio de labor  y educacion de la familia; y de mucha caridad.
Jph. de Frias Moso de labransa. su edad 30 as.
Jph. Delgado Moso de labransa. su edad 20 as. Maria Josefa. criada. su edad 12 as.
Este labrador  puede senbrar  trigo 5 fgs. zevda. 10 fgs. zentno. 3 fgs. y comunmte. sienbra con 2 yunts. tiene 6 animales  grans.  de serbicio,  80 cabras.  30 obexas. y su buena. conbiencia de Biens. Rs. con harvoledas.

Según una hoja de servicios fechada a 31 de agosto de 1785, el teniente de fusileros de la 4ª Compañía don Diego de Torres contaba 37 años de edad y llevaba 14 años, 2 meses y 11 días de servicio, siempre en el Regimiento de Abona; figuraba como natural del “Lugar del Lomo”, con calidad de “hijo de Capitán”  y salud “robusta”;  siempre había servido en el mencionado Regimiento. Luego, en una relación de oficiales del Regimiento de Abona, fechada a 31 de marzo de 1788, se le incluía  con 17 años de servicio, de los cuales, 6 años, un mes y 19 días de subteniente; y 10 años, 8 meses y 11 días de teniente de la 4ª Compañía. En otra relación, fechada a 23 de febrero de 1790, figuraba como natural de Arico y teniente de la 4ª Compañía, especificándose que siempre había servido en el Regimiento de Abona. Y en una nueva relación del 1 de junio de 1791 contaba con 11 años, 11 meses y 11 días de servicios.

Años más tarde, el 31 de octubre de 1796, ya se había declarado vacante la tenencia de la 4ª Compañía del Regimiento de Abona “por averse retirado del servicio con Rl. La. de D. Diego Estanislao de Torres”; de ella se deduce que había permanecido durante unos 25 años sirviendo en las Milicias Canarias. El 30 de abril de 1797 aún continuaba vacante la tenencia de la 40 “por haberse retirado del servicio D. Diego Anto. de Torres que la servía”. Pero a pesar de su retiro, a nuestro biografiado se le continuó mencionando en diversos documentos como teniente capitán, por lo menos hasta junio de 1814.

Mayordomo de fábrica de la ermita de San Joaquín

Fue elegido por los vecinos mayordomo de fábrica de la ermita de San Joaquín de Fasnia, cargo que desempeñó durante diez años, desde el 8 de octubre de 1786 hasta el 19 de marzo de 1796. Como tal mayordomo, rindió cuentas de la ermita en cuatro ocasiones, la primera de ellas el 30 de octubre de 1789:
En el Lugar de Arico en treinta de Octubre de mil setecientos ochenta y nuebe as. ante el Sor. Dn. Juan  Agustin Quebedo Prevendado  de la  Sta. Iga.  Cathedral  de estas  Yslas, examor. sinodal de este Obispado, Hacedor de rentas decimales Vene. Vicario ecleciastico de este Partido de Taoro, Jues Visitador ordino. por el Iltmô. Sr. Dn. Antonio de la Plaza, Dignisimo Obispo de estas Yslas, del Consexo de su Magd. y de mi el infraescrito Noto. puco. y de Vicita parecio el Tente. Capn. Dn. Diego estanislao de Torres vecino de este dho Lugar Mayordo. de la Hermita del Sor. Sn. Joaquin, con motibo de dar las cuentas de su cargo para cuyo fin produxo el Libro borrador que las comprehende desde el dia ocho de octubre del año de 86, hasta el presente [...].

El cargo de dichas cuentas ascendió a 1.294 reales y 44 maravedíes: 388 reales y 32 maravedís que dieron de limosna los vecinos en ese tiempo; 210 reales que percibió de don Juan y don José Manuel, “por el tributo de dos fanegas anuales, que pagan donde llaman la fuente”; 30 reales que pagó don Juan Hernández por cuenta de ese mismo tributo; 50 reales percibidos de  doña  Francisca Rodríguez, también por dicho tributo; 500 reales  “que de limosna mandó de Caracas Antonio Dias”; y 116 reales y 12 maravedíes “por el tributo de la fuente”. Por su parte el descargo se limitó a 508 reales y 45 maravedís: 51 reales y 42 maravedíes “gastados  en el lienso y una punta pa. amitos purificadores &a”; 1 real y 42 maravedíes por labor de la cera; 127 reales y medio “gastado con los Cantadores”; 19 reales y 36 maravedíes por el trigo de las hostias; 10 reales y 39 maravedíes que costó el vino para las misas; 6 reales y 12 maravedíes “costo de un amito”; 18 reales y 36 maravedíes “de varrer la Hermta. y echar el agua en la Pila”; 112 reales y 24 maravedíes por “hacer y bajar unas toces de madera pa. la Hermita”; 10 reales “costo de la echura de una casulla”; 60 reales que costaron 9 libras de cera compradas a distintos precios; 90 reales y 30 maravedíes “valor de un poco de tafetan  pa. una casulla”.  Por lo tanto, el mayordomo resultó alcanzado en su contra con 785 reales y 47 maravedíes. En cuanto al cargo de la cera, ascendió a 13 libras y nueve onzas, de las que 4 libras y 7 onzas se le entregaron a su entrada y el resto las compró en esos años; de las cuales gastó 13 libras y 8 onzas, por lo que sólo quedaba en su poder una onza de cera. Una vez vistas las cuentas fueron aprobadas por el juez visitador, quien dio “las devidas gracias al presente Mayordo. por el celo y debocion con que ha procurado el aseo y reparo de la Hermita”. Los derechos de esta cuenta y visita ascendieron a 10 pesos por ser realizada “a mas de tres leguas de distancia”.

De 1789 a 1792 se volvieron a hacer obras de reforma en el templo, pues se gastaron 80 reales en dos millares de tejas y 120 reales en reedificar y sollar la ermita, tal como se desprende de las cuentas otorgadas en el último año por el mayordomo al párroco de Arico don José Hernández de Ara:
En el Lugr. de Arico a primero de Noviembre de mill setecientos noventa y dos años. Yo Dn. Josef Hernands. de Ara Cura de la Parroql.  del Sr. Sn. Juan Baupta. de dho Lugr. en cumplimiento de lo mandado por el Yltmo. Sr. Dn. Antonio Tavira y Almazán Dignismo. Obpô. de estas Yslas de Canars.  del Concejo de S.Md. &. mi Sr.; tomé las cuentas de la Hermita de Sn. Joaquin  al Thente. Capitn. Dn. Diego de Torrs. actual  Mayordo. las qe. prometio dar bien y fielmte. desde el dia treinta de Octube. de mill setecientos ochenta y nuebe asta el precente dia [...].

El cargo se elevó a 1.282 reales de vellón antiguo y 24 maravedíes: 785 reales y 47 maravedíes, que tuvo de alcance dicho mayordomo en las cuentas anteriores; 240 reales de limosnas en el tiempo de dichas cuentas; un peso fuerte (13 reales y 16 maravedíes) que le dio de  limosna  don  Juan  González  Leonardo;  63  reales  y  9  maravedíes  “Por  el  tributo encabesado en Luis Diaz Marrero de veinte y un reals. vellon antiguo y tres maravs. en los tres años de estas cuentas”; y 18 pesos (180 reales) “Por sien fanegs. de trigo dé á dos por año qe. paga Josef Manuel del tributo de la Fuente, a precio de tres pessos fanega”. Por su parte el descargo supuso 799 reales y 21 maravedíes: 133 reales y 36 maravedíes por 19 libras y media de cera comprada a distintos precios; 7 reales y 24 maravedíes por la labor de 12 libras de cera; 30 reales por “siete Huellas qe. se compraron”; 80 reales “de dos millars. de texa qe. se compraron”; 120 reales “costo de reedificar y sollar la Hermita”; 100 reales de derechos de la visita anterior; 33 reales y 36 maravedíes “pagos a la qe. laba,  plancha  y apunta la ropa de la Hermita, en los tres años de estas cuentas”; 20 reales “pagos a la qe. barre y trae agua para la Hermita”; 12 reales y 24 maravedíes por 20 cuartillos de vino para las misas, a medio real el cuartillo; 7 reales y 24 maravedíes por tres almudes de trigo para las hostias; 36 reales de plata (45 reales vellón antiguo), a 12 pesos por año, “pagos al qe. sirve la Hermita aiuda a misa, cuida de las llaves, y da cuenta de lo qe. existe en ella”: 60 reales “costo de un dedito qe. se puso al Niño, Barnis y ropa”; 18 reales y 36 maravedíes “pagos á Luis Diaz Marrero por un año y quatro meeses qe. sirvio la Hermita”, los que se le rebajaron del tributo que éste pagaba, dando por no cobrados los 44 reales y 21 maravedíes restantes; y 105 reales que da por no cobrados a don José Manuel por el tributo de la Fuente, pues sólo le ha cobrado 75 reales. El alcance a favor de la hermita se elevó por tanto a 483 reales y 3 maravedíes.  En  cuanto al  cargo  de  la  cera  se  elevó a  19 libras  y nueve onzas, que  el mayordomo compró en ese tiempo, salvo una onza que quedaba de las cuentas anteriores; de éstas gastó 15 libras en esos tres años, por lo que quedaban en su poder 4 libras y 9 onzas. Visto lo cual, fueron aprobadas dichas cuentas, firmando el párroco don José Hernández de Ara, su teniente fray José Neda y el mayordomo don Diego Antonio Estanislao de Torres.

En 1793 volvió a rendir cuentas: “En el Lugr. de Arico á primo. de Disiembe. de mil setecientos noventa y tres años, Yo Dn. Josef Hernands. de Ara Cura de la Parroql. del Sr. Sn. Juan Baupta. de dho lugr en cumplimto. del mandato superior qe. antecede tomé las cuentas de la  Hermita  de Sn. Joaqn.  al  Thente. Capitn.  Dn. Diego de Torres  actual  Mayordo. las  qe. prometio dar vien y fielmte. desde el dia primo. de Noviembe. de noventa y dos asta el presente dia y mes”. Presentó un cargo de 758 reales vellón antiguo, 4 cuartos y 3 maravedíes: 483 reales y 3 maravedíes del alcance de las cuentas antecedentes; 10 reales “de ocho luces”; 35 reales “de quatro fanegs. de papas”; 165 reales del tributo de la Fuente, de a dos fanegas de trigo por año, “a razon de treinta reals. fanega”,  a cargo de don José Manuel; 65 reales y medio del tributo encabezado en don Luis Díaz Marrero. Por su parte el descargo se limitó a 183 reales: 75 reales que costaron 10 libras de cera; 3 reales y 6 cuartos que costó un almud y medio de trigo para hostias; 5 reales de 6 cuartillos de vino para las misas; 6 reales y dos cuartos por la labor de la cera; 15 reales pagados “por labar, planchar, y apuntar la ropa de la hermta.”; 15 reales pagados “al qe. sirve la ermita”; 10 reales pagados “a la qe. barre  la hermita y êcha agua en la pila”; 35 reales y medio que da por no cobrados del tributo de don Luis Díaz Marrero; y 17 reales y medio que da por no cobrados del tributo de don José Manuel en las tierras de la Fuente Nueva. Por tanto resultó alcanzado el mayordomo con 575 reales, 4 cuartos y 3 maravedíes. En cuanto al cargo de la cera se elevó a 14 libras y nueve onzas, de las que compró 10 libras en ese año y se gastó 8, quedando en su poder 6 libras y 9 onzas de cera. El párroco Hernández de Ara dio su conformidad a las cuentas, que firmó junto a su teniente fray José Neda y el mayordomo Torres. Estas cuentas fueron aprobadas en la Santa Visita efectuada al lugar de Arico el 3 de enero de 1794 por “el Sôr. Dr. Dn. Domingo Albertos de Miranda Abogado de los Rs. Consejos, y Visitador por el Ilmô. Señor dn. Anto. Tavira y Almazan Obpô. de Canaria del Consejo de S.M. & mi Sôr.”, quien manifestó esperar del mayordomo “continuará como htâ. aqui con el fervor, y devocion para el aumto. del culto a el Sôr. aceo y desencia de la Hermita”. Así lo proveyó y firmó ante el notario público y de visita don José Antonio Gómez.

Las últimas cuentas de la ermita las dio el teniente don Diego Antonio Estanislao de
Torres, su último mayordomo, el 30 de marzo de 1796:
En el Lugar de Fasnia en treinta dias del mes de Marzo de mil setts. noventa y seis; Ante mi el Cura de dho Lugar Dn. Juan de Castro y Baute, parecio precente el Thente. Capn. Dn. Diego Antonio de Torres, Vecino de dho Lugr. â efecto de dar  las cuentas como Mayordomo qe. ha cido de la Hermita de Señor San Juaquin; la qual se a promovido, y erigido Parroqa.  pr. el Iltmo Sôr. Obpô. Dn. Anto. Tavira y Almazan por cuio motivo, pasando  estos vienes pertenecientes  a  la  que hera  hermita,  a la  nueva Parroqa.  y su fabrica; para  seguir en lo adelante nueva y distinta cuenta, se le toma y la da desde el primo. dia del mes de Dize. de mil septs. noventa y tres hasta el dies y nueve de Marzo de mil septs. noventa y seis en que tubo principio dha Parroqa.  [...].
El  cargo  de  estas  últimas  cuentas  se  elevó  a  89  pesos,  6  reales  de  plata  y  60 maravedíes: 57 pesos y medio (575 reales vellón antiguo) y 27 maravedíes que tuvo de alcance dicho mayordomo en las cuentas anteriores; 13 pesos y 6 reales de plata por las dos fanegas  de  trigo  anuales  del  tributo  de  la  Fuente  Nueva;  4  pesos,  5  reales  plata  y  33 maravedíes por el tributo del Lomo del Santo, a dos pesos y un real plata anuales; 8 pesos y 3 reales plata de limosnas de papas; un peso y medio de “limosnas de Alquileres de Luces”; 4 pesos percibidos de otras limosnas en ese tiempo. Por su parte el descargo se limitó a 34 pesos, 5 reales plata y 31 maravedíes: 1 peso, 5 reales plata y 19 maravedíes gastados en 6 almudes y 4 cuarticas de trigo, gastado en hostias; 2 pesos y 6 reales plata por 33 cuartillos de vino, gastados en las misas; 3 pesos y medio y 32 maravedíes “pagados en dho tmpô al qe. ha servido la  Hermita a  dose rrs.  pta. pr. año”;  igual cantidad pagada por lavar, planchar y apuntar la ropa de la ermita; 21 pesos y 3 reales de plata por compra de 28 libras y media de cera, a 6 reales de plata la libra; 1 peso, 6 reales plata y 12 maravedíes, por labrar dicha cera. Por consiguiente, resultó un alcance en poder del mayordomo de 55 pesos, un real de plata y 29 maravedíes. La cuenta de la cera en ese tiempo dio un cargo de 35 libras y una onza, de las que había comprado 28 libras y media y gastado 26 libras y una onza, por lo que quedaban en su poder 9 libras. Firmaron las cuentas el citado párroco Castro Baute y el mayordomo Torres.

Presidente de las juntas para la creación de la parroquia, primer sindico personero del Ayuntamiento de Fasnia y apoderado para el cabildo abierto4

Al margen de su vida militar, nuestro personaje fue uno de los promotores de la creación de la parroquia y ayuntamiento independiente en Fasnia, segregados de Arico.
Figuró entre los vecinos que en noviembre de 1795 elevaron una representación al alcalde  mayor  de  la  Villa  de  La  Orotava  para  que  les  autorizase  a  celebrar  las  juntas necesarias para tratar sobre la creación de la Parroquia de San Joaquín, así como para que nombrase la persona que debía presidirlas. Precisamente este nombramiento recayó en su persona, pues el 23 de dicho mes el alcalde mayor de la Villa de La Orotava, Lcdo. don Antonio Minovés y Servos, abogado de los Reales Consejos, consideró que era la persona idónea para presidir dichas juntas: “pa. qe. estas actas se selebren con la autoridad  devida presidiendolas  algun  suxeto de  providad,  concurriendo  esta  sircunstancia  en  dn.  Diego Estanislao de Torres le nombra su mrd por tal Presidte. y al sugeto qe. este tenga por mas convente. para qe. autorise las sinificadas juntas, en calidad de esno”.

Cinco días después el teniente Torres recibió su nombramiento y convocó la Junta para el día 6 del siguiente mes de diciembre de 1795 en la plaza de la ermita de San Joaquín. En esta asamblea se otorgó un poder absoluto a favor de varios vecinos, con el fin de que hiciesen todas las gestiones necesarias para elevar a parroquia dicha ermita.

Luego, en la Junta celebrada el 23 del mismo mes de diciembre de 1795 fue elegido como uno de los comisarios de electores que debían proceder a la constitución del primer “ayuntamiento” de la localidad, obteniendo 19 votos. Al día siguiente se reunieron en la ermita de San Joaquín los 24 comisarios electos, que representaban a  las personas más notables de la jurisdicción, con el fin de elegir al alcalde real, dos caballeros diputados del común, el síndico personero y el fiel de fechos; entre dichos cargos resultó elegido por aclamación como primer síndico personero de la localidad el teniente capitán don DiegoEstanislao de Torres, con 22 votos.

El 8 de diciembre del citado año 1796 don Diego de Torres cesó por enfermedad en su cargo de personero, siendo sustituido por don José Juan Díaz. Sin embargo, no se desvinculó de la vida municipal, ya que el 21 de diciembre de 1797 fue elegido apoderado de Fasnia para acudir al ayuntamiento general que se debía celebrar en la Villa de La Orotava. Pocos días después, el 27 de ese mismo mes de diciembre, volvió a ser proclamado síndico personero de la localidad, tomando posesión de dicho cargo el 1 de enero siguiente; fue reelegido en el mismo el 23 de diciembre de 1798, cesando definitivamente como tal personero el 1 de enero del año 1800.

Donante del solar para la nueva iglesia parroquial y contribución a la nominación del nuevo termino5

Tras constituir su primer ayuntamiento, los esfuerzos de los vecinos se centraron en lograr la creación de la parroquia. Era fundamental su dotación económica y para ello se comprometieron con imposiciones de dinero para la fábrica parroquial o de aceite para la lámpara del Santísimo Sacramento. Pero la erección parroquial tropezaba aún con otro obstáculo. Cuando los vecinos de Fasnia le plantearon al obispo Tavira su deseo de erigir en parroquia su antigua ermita de San Joaquín, éste les puso como condición previa el que se comprometieran por escrito a donar los terrenos y a construir una nueva iglesia, de mayor capacidad y situada en lugar más céntrico. Asimismo, en el auto de la Real Audiencia por el que se autorizaba la elección del primer ayuntamiento de esta localidad, se estableció, como ya hemos indicado, que la nueva alcaldía pedánea llevaría la denominación del barrio en el que se construyese la nueva iglesia parroquial.

Paralelamente, para cumplir con la condición exigida por el obispo, el 17 de enero de
1796 se reunieron en la plaza de la mencionada ermita la mayor parte de los vecinos de estos pagos, con el fin de elegir el sitio donde se habría de construir la nueva parroquia que pretendían y, habiéndose discutido varias propuestas, resolvieron edificarla en el pago de Fasnia, en los terrenos ofrecidos al efecto por el alcalde real don José Díaz Flores, juntamente con su mujer doña María Josefa, y por el teniente don Diego de Torres y su esposa doña Bárbara Petra Llarena, situados en lugar más céntrico que la antigua ermita. Por este motivo el nuevo término llevaría en adelante el nombre de Fasnia, en cumplimiento del auto de la Audiencia que especificaba: “el  qual  se denomine con el  nombre del  Barrio  en que se fabrique la Parroquia”.  Por su interés reproducimos el acta de dicha junta, presidida por nuestro biografiado:
En el Pago de Fasnia a dies y siete de Eno. de este Año de mil septos. novta. y seis estando en la  Plasa  de la  Hermita  del Sor. Sn. Juaqn.  la  Mayor Parte  de Vezs. de estos sus respectivos  Pagos,  a  presencia  del  Sor. Dn.  Diego  Antto. Estanislao  de  Torres  como presidente  de esta Junta  Juntamte.  con el Sr. Dn. Josef Diaz Flores  Alcde. rrl.  de este territorio y los sres  rexidores del comun qe. lo son Dn. Mateo Diaz y Dn. Juan Cruz, y de personero  el expresdo. Dn. Diego de Torres,  con Dn. Luis Diaz Marrero  fiel de fhos, haviendolos convocado desde el dia trese del corrte. a pedimento de los apoderads. en el poder otorgado con fha de seis del mes de Diciembre, se propuso, pr. los enunciados Sres. qe. a todo el pueblo eligieran  el sitio donde se havia de erigir  la parroqa.  que tienen determinado y haviendo conferido, y oidoles varias propuestas Resolvieron, con igualdad a los apoderados, que en virtud, a que el presente Sr. Alcalde Juntamente con su Muger Da. Maria Josefa, el espresado Dn. Diego de Torres y Da. Barbara  Petra que tambien lo es lexma. del citado cavallero Torres han ofrecido el citio pa. dha Parroqa.  en esta dha situacion de Fasnia, y juzgandole pr. util desde luego lo aceptan, y dan las Gracias a los Srs. pr. tan buena obra,  pr. conoser, la utilidad que se sigue en no haver mejor fundo donde   poder   Plantificarla,   y   desde   luego,   estando   concordes   se   otorguen   las correspondtes. escrituras de dan. pa. con ellas y con las mas de dotacion de Aseite y fabrica ocurrir al Yltmo Sor. Obpô. qn. desea segn. le consto pr. Sta. Genral. Vicita, la nesesidad con que Pedimos pr. ser tan nessa. y se firmo este acuerdo pr. todos los que supieron con el Sr. Presidte. y acompdo. de que yo el preste. fiel de fhos doi fee. = Diego Antonio Stanislao Torres = Joseph Dias Flores = Juan de la Cruz, Mateo Dias Perera = Ante mi Luis Dias Marrero fiel de fechos.

El día 26 de ese mismo mes de enero se otorgó la escritura de donación de los terrenos para la nueva iglesia parroquial, que transcribimos literalmente a continuación:
Sepan quantos esta escritura vieren, como Yo el Capn. Dn. Diego Anto. estanislao de torres y Da. Barbara  Petra Llarena marido y muger Y Dn. Josef Diaz Flores Alcle. rrl. de este terio. de Fasnia, y Da. Maria Josefa su legmâ muger vezs. del espresado lugar de Fasnia presedidos los consentimtos. y Respetivas lizs. qe. pr. los dhos sus maridos, les fue concedidas y aceptada pa. la preste. escritura su validasn. en lo que fuere nesso. Y dijeron que pr. quanto el dia dies y siete de Eno. del corrte. se hizo Junta de todos los Vezs. de dho lugr. y pagos respetivos, donde conferenciaron en que sitio se havia de fundar la Yga. que con Beneplacito del Yltmo Sr. Obispo se a de erigir, y en aquel acto haviendose propuesto a  todos  los  de  la  junta  que  pr.  nuestra  parte,  donabamos,  sitio  correspondte.  pa.  la espresada  fundasion, pr. tanto y poniendolo en execusn. otorgamos que por la presente donamos, un sitio bastantemte. largo qe. tenemos en dho Lugr. suficiente a la obra piadosa pa. onrra y Gloria de Ds. Nro Sr., el que se halla alinderado pa. este fin, con igl. acuerdo de sugetos de onor y satisfasn. el que linda pr. naciente Calle rrl. poniente y pr. abaxo io la referida Da. Barbara,  con trra   qe. me queda y pr. arryba.  trrâ  que nos queda a mi dho Flores,  el que es propio nuestro, comprado pr. mi el consavido Dn. Josef y la dha su Muger, segn. escrituras que reservo en mi poder, y pr. lo que mira al que io dha Da. Petra dono, lo ê heredado de mis Padres,  a cuia seguridad, obligamos nro  bienes presentes y futuros, con advertencia, qe. esta donasn. no se opone, a desfalcarnos, nrô Caudal, ps. la concideramos pr. tenuidad, y quedar gustosos en que se verifique cumplido un acto tan heroyco que desde nrôs projenitores se a anelado damos poder a las Justicias de S Magd. pa. su observancia como si lo dho fuese pr. senta. pasada de Jues competente y no apelada con especial  denuncia  &a. pr. la  que nos corresponde  como mugeres de las  que nos corresponde,  y como tales juramos por la señal de la Cruz que en forma de derecho himos, con nuestra mano derecha no emos padecido violencia ni engaño, antes si nuestros Maridos nos viven agradecidos pr. tan conocida caridad, y que no usaremos de reclama, y si tal susediere que no valga ps. siempre ha de quedar esta Escritura perpetua y en fuerza y vigor, y todos suplicamos al Yltmo. Sr. Obpô de estas Yslas acepte esta donasn. pa. que se pueda imprimir la nueva Yga. a favor Piadoso, entendiendose que esta escritura  no queremos le falte Clausula ps. la deseamos con toda Generalidad pr. lo que renunciamos la Genrl. en forma es fha en este dho lugr. a beinte y seis de Enero de este Año de mil septs. noventa y seis, y los otorgantes  a qn. io el infâ escripto fiel de fho doi fee que conosco, son los contenidos, firmaron los espresados Srs. Dn. Diego Torres y su muger Da. Barbara, el dho Sr. Alce. Dn. Josef Diaz Flores, y pr. la consavida su muger Da. Ma. Josefa qe. espreso no saver lo hizo uno de los presentes que lo fueron Domo. Diaz Vezo. del lugr. de Arico, Be. Chico y Juan  Gaspar  Rodrigs. con Augn. Geronimo todos de dho Lugr. firmaron los que supieron y de ser y pasar  asi doi fee io el citado fiel de fhos = Diêgo Antonio Stanislao Torres = Barbara Petra llarena = Joseph Dias Flores = Domo. Diaz = Ante mí Luis Dias Marrero fiel de fechos.

Imposición de aceite para sostener la lampara del Santisimo Sacramento en la nueva parroquia6

Para la seguridad del aceite de la lámpara del Santísimo Sacramento en la nueva parroquia de San Joaquín, entre el 20 y el 27 de enero de 1796 los vecinos más pudientes e interesados en que se verificase dicha erección parroquial otorgaron las correspondientes escrituras de imposición perpetua de aceite para sostener la citada lámpara, con hipoteca expresa de bienes raíces “y todas las solemnidades necesarias”.  Los vecinos se obligaban a dar y pagar anualmente, y a perpetuidad, una cantidad de aceite “bueno, Claro y de Resevir”, “pa. que arda en la Luminaria del SSmô Sacramto. de la Yga. que todos los Vezs. pretendemos fundar con la Liza. el Sr. Obpô de estas Yslas; en la cituasn. qe. se halla señalada en este dho Pago”, lo que a veces se redactaba con otras variantes, como la siguiente: “pa. la lampara del SSmô Sacramento que se ha de instituir en la Yga. que con liza. del Yllmo Señor Obpô de estas Yslas han determinado fundar en el Pago de Fasnia”.  En las escrituras se especificaba que “pa. que este Sego. y cierto, desde luego” dicha carga la imponían sobre algunos de sus bienes, que “no benderemos ni enagenaremos” sin la indicada pensión “y lo encontra que no valga”, y para mayor seguridad se obligaban con persona y bienes. Debían hacer dichas pagas en el día o mes que se señalase “pr. el Maiordomo de fabrica, o quien tubiere a su Cargo encender la Luminaria”.

De los 44 otorgantes, 43 eran vecinos del pago o barrio de Fasnia y tan sólo uno lo era de La Zarza (don José Tejera); entre ellos destacaron como mayores donantes el teniente capitán don Diego Antonio Estanislao de Torres y su esposa doña Bárbara Petra de Llarena. El día 26 de enero sólo se otorgó la escritura de estos ricos donantes, quienes sabían escribir y se obligaron con una imposición perpetua de once cuartillos de aceite, impuestos sobre un pedazo de tierra en “donde llaman la Puente”; otro pedazo “donde llaman queba de Maria”; otro “donde disen las  Goteras,  que estan  el primo. donde disen Amea, el segdo. bajo  la Montañeta qe. titulan de Pablo,  el tercero  en misma trrâ  que titulan de dho Pablo”;  otra suerte “en citado Amea”; otra suerte “en la era  de Joaquin”; otra suerte de tierra “en dha Montaña de Pablo”; otra suerte de tierra “donde notan el Pinar”; otro pedazo de tierra “mas arriva  del camo. rrl.”;  y otra suerte de tierra “en el precitado Amea”; todas las antedichas tierras fueron heredadas por doña Bárbara de sus padres, el capitán don Bartolomé Megías y doña Bárbara de Llarena, y de su tío don Bartolomé Llarena. Las citadas tierras de Amea estaban en El Escobonal y las de Pablo en Lomo de Mena, ambos pagos en el vecino municipio de Güímar.
Mediante escrito del obispo don Antonio Tavira, de fecha 29 de ese mismo mes de enero, se aceptaban los terrenos cedidos por este matrimonio, condición exigida por el prelado para emitir su Decreto de erección.


Mayordomo de fabrica de la nueva parroquia de San Joaquín

Luego, tras ser elevada a parroquia, por decreto del 3 de marzo de ese mismo año 1796 y redactado por su secretario el Dr. don Mateo de Obregón Cevallos, el obispo de Canaria don Antonio Tavira  y Almazán nombró al  teniente capitán don Diego Antonio Estanislao de Torres como primer mayordomo de la fábrica parroquial:
Por quanto es necesario nombrar Mayordomo que cuide de la Fabrica de la nueva Iglesia Parroquial  que se ha erigido en la Hermita de San Joaquin, sita en el Pago de Fasnia, y segregada  de la Parroquia  del Lugar de Arico, y estamos informados que Dn. Diego de Torres vecino de este dicho Lugar es á proposito para el desempeño de la Mayordomia: Por el presente confiando de la buena conciencia del referido Dn. Diego, y que atenderá al servicio de Dios nuestro Sôr y culto de su Madre Santisima, en descargo de la nuestra, y pr. el tiempo de nuestra voluntad le elegimos y nombramos por Mayordomo de Fabrica de la mencionada Parroquia,  y le damos poder y facultad el que de drô se requiere y es necesario  para   que  cobre  y  perciba  qualesquiera   rentas  y  limosnas  que  â  dicha Mayordomia pertenezcan, llevando â su poder todo lo que se hallare  ser y tocarla,  de todo lo qual hará  Inventario y dará  fianza â satisfacion  del Ve. Cura  de la expresada nueva  Iglesia,  que  asi  lo  hará  cumplir;  y  mandamos  sea  habido  y  tenido  por  tal Mayordomo de Fábrica  y se le guarden los privilegios y exenciones debidas. Dado en el Puerto de Santa Cruz de esta Isla de Tenerife â tres de Marzo de mil setecientos noventa y seis.

La parroquia comenzó a regir el día 19 de ese mismo mes de marzo de 1796, aunque con carácter interino. Al día siguiente, 20 de marzo, el Sr. Torres tomó posesión del cargo de mayordomo de fábrica, en el que permaneció tan solo dos años, pues el 21 de marzo de 1798 se  le  aceptó  la  renuncia al  mismo,  pues  “como este  encargo  necesita  de  una  continua atencion, maiormente en una Iga. qe. se esta actualmente fabricando, y esto no puede el exponente cumplirlo pr.  sus indisposiciones habituales  ademas  de que se halla  fuera de aquella jurisdiccion mas de la mitad del año en la solicitud de sus haciendas, padeciendo pr. este medio falta de cuidado, y un notable atraso la obra Pia”. No obstante, el teniente Torres permaneció en el cargo hasta el 30 de septiembre de dicho año, en que presentó las cuentas de su mayordomía.

Según el inventario levantado el 20 de marzo de 1796 por el párroco don Juan de Castro y Baute, ante el notario don Domingo Díaz, al tomar posesión como mayordomo de la fábrica parroquial el teniente don Diego Antonio Estanislao de Torres, sabemos que éste custodiaba en su casa algunos bienes de la parroquia: “Pasando  inmediatamte. en casa del Mayordomo de Fabrica  dn. Diego de Torres se encontró una Arca o caja de pino grande, qe. tambien dixo ser de la Yga.”.

El 1 de mayo de 1796 se reunieron los apoderados nombrados en la junta celebrada el
6 de diciembre del año anterior, con las autoridades locales y la mayor parte de los vecinos de los pagos, bajo la presidencia del teniente capitán don Diego Antonio Estanislao de Torres, para iniciar los trámites de construcción de la nueva iglesia parroquial. La primera medida tomada fue la elección del recaudador o depositario de las limosnas que los devotos de la jurisdicción fuesen dando para la obra, cargo que recayó en el citado teniente Torres, que también era personero del lugar:

En el Lugar de Fasnia  de esta Ysla de tenerife a primero dia del Mes de Mayo de Mil septs. novta. y seis años estando Juntos los Sres. Apoderados que se han nombrado pr. el poder dante pr. todo este vecindario pa. el efecto, de determinar lo conducente a beneficio, de la nueva Yga. que pretende este Vecindario dho edificar, segun el otorgdo. con fha de seis de Diciembre de mil septs. noventa y cinco, que anteladamte. se halla en este libro; y Juntamente el Sr. precidte. Dn. Diego Antonio Stanislao de torres, Dn. Josef Diaz Flores Juntamente con la mayor parte de vezs. de los Respectivos pagos de su demarcasion pr. presencia ygual de los Sres. Rexidores del Comun Dn. Mateo Diaz Perera y Dn. Juan Cruz, el  consavido  Dn.  diego  de  Torres  tambien como personero  a  presencia  de  Dn.  Luis Marrero  Fiel  de  fhos,  Dixeron  qe.  pr.  quanto,  estan  solicitando  edificar  una  nueva Parroquia,  segn. se les a consedido pr. el Yllmo. Sr. Obpo. de esta Yslas, y siendo Nesso. nombrar un suxeto de bastante providad, pa. que recaude  las limosnas, qe. los devotos fueren dando y encontrandose, las circunstancias  devidas en el apuntado Dn. Diego de Torres, le aprovaron  pr. tal depocitario, pa. que obre todas las presisas [roto]ciones de cargo,  descargo  pa. que todo conste en qualesqa. tiempo, y dho señor electo se dio pr. nombrado, segun y como deve en el preste. caso, y firmaron los que supieron de que da fee el preste. fiel de fhos =En compa. de el Sr. Dn. Juan de Castro y Baute Vene. Cura de la Parroql.  del Sr. Sn. Joaqn. de dho lugr. / Juan de Castro y Baute / Diego Antonio Stanislo Torres / Joseph Dias Flores alcalde Real / Mateo Dias Perera  / Franco   Liodo Gonsales / Antonio Marques Rodriguez / Como fiel de fechos Luis Dias Marrero.

El  3  de  mayo  del  año  siguiente,  se  volvieron  a  reunir  los  apoderados  con  las autoridades locales en la iglesia de San Joaquín, para aprobar las cuentas presentadas por el recaudador don Diego de Torres, quien aprovechó la reunión para presentar la dimisión de dicho cargo por sus muchas ocupaciones y su precaria salud, siendo nombrado en su lugar el ex-alcalde don José Díaz Flores, que era uno de los apoderados:
En el Lugar de Fasnia  de esta Ysla de Tenerife a tres de Mayo de Mil septs. noventa y siete as. estando en la Parroqa.  del Sr. Sn. Joaqn. su Mercd. el Sr. Dn. Juan  de Castro Venerabe. Cura de ella el Sr. Dn. Gaspar  Delgado Alcde. rrl   con los Srs. diputados del Comun Dn. Joseph Texera de la o, y los personeros apoderados Nombrados pa. el efecto de contruir la Nueva parroquia  qe. con Beneplacito del Yllmo. Sr. Obpo. Dn. Anto. Tavira y Almazan qe. lo fue de estas Yslas,  pretenden edificar  y Juntamte. el Sr. Dn. Diego Anto.

Stanislao de Torres como presidte. de la Junta, en qe. acompaño Dn. Amaro Jose Diaz Personero se propuso pr. el sdho Sr. presidte. que atendiendo a haversele nombrado pr. los dhos apoderados segn. poder de seis de Diciembre, de 95, en primo. de Mayo de noventa y quatro [sic]8, de depocitario de las limosnas, qe. pa. la nueva Yga. se dieran y Remedio de la preste. lo que en efecto a exercido todo el tiempo qe. se dexa ver, y haciendo preste. no poder dar Cumplimto. asi pr. sus muchas ocupaciones como, pr. sus enfermedades, supco. se sirviesen nombrar otro suxeto qe. con actividad cumpliese dho Encargo, y en efecto, haviendole  Resevido su  quenta  con  cargo  y  descargo  que  acreditan  pr.  piadosa  y berdadera, y su total alcanse que fue el de ochenta y dos ps. cinco rrs. pta. y seis qtos. corrs. lo dieron  pr. libe. pr. no dever cosa  alga.  y en la  propia  ora  se entregó  este Caudal ecistente a Dn. Josef Diaz Flores uno de los apoderados, qn. se hizo cargo de seguir con dho encargo al Beneffo. piadoso segun se deve, previniendo dara el correspondte. recivo a dho Cavallero pa. su total abono, y se le encarga el Zelo Cuidado, Cargo y descargo que exercerá, pa. qe. la de pr. el Sr. Jues de la competencia de dha quenta, o siempe. qe. los Sres. de esta Junta Popular, les sea presiso pa. el conocimto. De su fondo a beneffo. de la fabrica y estando en concordia se firmo Por el dho Vene. Parroco Dn. Juan de Castro y Baute, Dn. Gaspr. Delgado dho Sr. Jues el consavido señor personero y todos los mas Srs. Personeros apoderados en este Ramo y de ser asi cumplido doi fee yo el presente Fiel de fhos. / Juan de Castro y Baute / Diego Anto. Stanislao Torres / Joseph Dias Flores / Franco  Lionardo Gonsales / Antonio Marques Rodriguez / Luis Dias Marrero / Ante mi Domo. Diaz Fiel de fhos.

Según las cuentas que presentó don Diego Estanislao de Torres, como depositario de las limosnas “qe. dan los fieles pa. la fabrica de la nueva Yga. y nesesidades de la preste.”, se habían recaudado 458 pesos, 6 reales de plata y 4 cuartos corrientes, de los que se gastaron 375 pesos, 7 reales de plata y 14 cuartos, por lo que quedaron en fondo 82 pesos, 5 reales de plata y 6 cuartos. Para recaudar las limosnas, don Diego contó con una serie de cobradores: don Francisco Salvador, don Antonio Rosa, don Juan Cruz, don José de la O, don Bartolomé Mateo, don Agustín de Frías, don Francisco Leonardo y don Pedro Francisco. Entre los ingresos destacaron los 40 pesos corrientes que mandaron de  Indias don Juan González Leonardo, don Juan Tomás y don Juan Marrero, lo que indica que todos los emigrantes no se desvinculaban de su pueblo natal. Asimismo, un devoto dio 2 pesos para dos aras.

Parte de las inversiones realizadas con dicho dinero fueron destinadas al comienzo de las obras de la nueva iglesia: 42 pesos que se dieron a don José Pedro García “pa. el corte de la Mada. pa. la Yga.”; 31 pesos y un real de plata que tomó don José Flores “pa. la serreria”; 4 pesos “qe. costaron dos picos pa. la fabrica”;  y 4 reales dados a dos peones “pa. retirar  la Mda. del peligro del Barranco”.  Otras sumas fueron invertidas en las alhajas y ornamentos necesarios para la parroquia: 32 pesos fuertes “qe. pa. Ropa de Yga. tomo Dn. Jn. de Castro”; 40 pesos que tomó dicho cura “pa. la Ropa de Yga. Yncensario y Ritual”; otros 20 pesos entregados al cura don Juan de Castro “en que dixo lo havia gastado en Ropa pa. la Yga.”; 44 pesos que se entregaron al alcalde don José Díaz Flores “pa. ornamtos. de Yga.”; 8 pesos, un real y 14 cuartos “por treinta y una bara de Lienzo”; otros 4 pesos dados al citado cura “pa. ornamtos. tambien de Yga.”; 4 pesos y 6 reales de plata que se dieron al alcalde Flores “pa. gastos de dha Yga.”; 30 pesos “qe. costaron la naveta con su cucharilla y una concha, todo de pta. pa. bautizr.”; y 3 pesos “pa. el fleto del Caxon de la Custodia”. Como inversión extraordinaria figuran los 12 reales de plata y una fisca “de la condusn. del dinero recevido en el Cargo  de Yndias”. A estas cantidades habría que sumar los 100 pesos que el propio depositario dio “por su mano” al párroco don Juan de Castro cuando éste fue a Santa Cruz, los cuales se gastaron en el copón, la custodia y el relicario para el templo parroquial.

A comienzos de 1798 el teniente don Diego Antonio Estanislao de Torres se dirigió al provisor y vicario general de la Diócesis, para presentar su renuncia al cargo de mayordomo de la fábrica parroquial, pues sus ocupaciones dentro y fuera del término, así como sus frecuentes achaques, le impedían atender a dicha responsabilidad con la dedicación que esta merecía, sobre todo la construcción de la nueva iglesia que, por dicho motivo, se encontraba atrasada:
Sôr. Provr. y Vicario grâl = El Teniente Capitan Dn. Diego Antonio de Torres vecino del Lugar de Fasnia á V.S. como mas haya lugar en drô. á V. Dice: Que se halla con el titulo de Maiordomo de Fabrica  de aquella Parroquial,  y como este encargo necesita de una continua atencion, maiormente en una Yga. qe. esta actualmente fabricando,  y esto no puede el exponente cumplirlo pr. sus indisposiciones habituales ademas de que se halla fuera de aquella jurisdiccion mas de la mitad del año en la solicitud de sus haciendas, padeciendo pr. este medio falta de cuidado, y un notable atraso la obra Pia; por tanto Suplica á V.S. se digne admitirle la renuncia de maiordomo de Fabrica  que actualmte. exerce, dando su comision al sugeto que sea de su maior agrado  para  que le tome las quentas, y confiriendo esta administracion á otro vecino en quien concurran las circunsts. necesarias,  que asi es justicia qe. con mrcd. implora & = Diego Antonio Estanislao de Torres.

Pocos días después, el  21 de marzo de dicho año, don José de Viera y Clavijo, arcediano de Fuerteventura, dignidad de la Santa Iglesia Catedral de Canaria, examinador sinodal, comisario real y gobernador del Obispado por el obispo de Canarias don Manuel Verdugo Alviturria, emitió el siguiente decreto aceptando la renuncia de don Diego:
En antencn. a los legitimos motivos qe. expone el Suplicante se le admite la renuncia qe. hace de la Maiordomia del caudal de Fabrica  de la Parroqa.  del Pueblo de Fasnia en la Ysla de Tenerife, tomandole el Vene. Cura de ella las cuentas finales en virtud de lo que esta mandado pr. punto general, y sin perjuicio de ello; propondrá  á la maior vrevedad dos ó tres  sugetos de los mas á  proposito  para  conferirsele este encargo,  poniendo interinamente persona de su satisfacion y de todo abono qe. corra con el cuidado de dha Maiordomia: Asi lo proveió y firmó el Sr. Governador de este Obpado de que doi fe = Dn. Joseph Viera y Clavijo = Jose Anto. Gomez Noto. mar.

El párroco don Juan de Castro y Baute cumplió lo mandado en el anterior decreto, por lo que el 30 de septiembre del mismo año nombró mayordomo interino a don Gaspar Delgado Baute y recibió las cuentas de don Diego de Torres. El cargo de éstas se elevó a 121 pesos corrientes, 3 reales de plata y 7 maravedíes; mientras que el descargo fue de 124 pesos, 3 reales de plata y 63 maravedíes. La mayor parte de los gastos correspondía a los derivados de la actividad cotidiana de la parroquia: compra de trigo para las hostias y vino para las misas; compra de cera; pagos al personal por barrer la iglesia, poner agua en las pilas, así como lavar y apuntar la ropa de la sacristía. Otros gastos se relacionan con la compra de ornamentos: forro y cinta para los frontales morado, negro y encarnado; cinta para la casulla verde; material y hechura de una sotana, con sobrepelliz y cuello, para el sacristán; etc. Finalmente, en gastos más llamativos destacaron: 3 reales de plata “qe. costaron las tablas del crucero, o vanco para  poner la cruz”; y 6 reales de plata “qe. costaron las tablas pa. el cajon de los difuntos”.

El 1 de noviembre de este último año 1800 se procedió a la solemne bendición de la nueva iglesia parroquial de Fasnia, construida en los terrenos cedidos por don Diego de Torres y su esposa. Dicho acto fue presidido por don Florentín Núñez y Torres, beneficiado de Güímar, estando también presentes en él su primer párroco interino, don Juan de Castro Baute, el que había sucedido a éste como cura servidor, fray Roberto González, y el que desempeñaba por entonces la titularidad de la parroquia, don Juan Evangelista Martínez Tejera. A dicho acontecimiento concurrió el alcalde, don José Tejera, con la mayor parte del pueblo, que no quería perderse aquel día histórico.

Fallecimiento en Arico El Nuevo

Don Diego de Torres continuó viviendo en Fasnia como propietario en la primera década del siglo XIX; por esa época era reclamado con frecuencia como testigo en la otorgación de testamentos y en la celebración de bodas, lo que constituía una prueba de consideración y respeto hacia su persona. Pero el 5 de junio de 1810 su existencia sufrió un duro golpe, ya que ese día falleció en Fasnia su entrañable compañera, doña Bárbara Llarena, cuando contaba 60 años de edad; había testado y recibido los Santos Sacramentos, y al día siguiente recibió sepultura en la iglesia parroquial de San Joaquín.
Don Diego se vio de repente solo en Fasnia, pues no había tenido hijos de su matrimonio, y acuciado por el dolor de la pérdida de su esposa, que recordaba a cada paso dado por la casa y su entorno. Por esta razón decidió trasladar su residencia al pueblo natal, donde residían la mayoría de sus familiares, estableciéndose en la casa nº 4 de Arico el Nuevo. Allí, dedicado al cuidado de sus propiedades agrícolas, permaneció hasta su muerte, en compañía de sus fieles criados Catalina Mederos y Juan Estévez Martín.

El teniente capitán retirado don Diego Antonio Estanislao de Torres falleció en su domicilio de Arico el Nuevo el 18 de agosto de 1832, después de otorgar testamento y recibir los Santos Sacramentos; contaba 83 años de edad, de los cuales había residido durante 37 en Fasnia. Al día siguiente se celebraron los funerales por su alma en la iglesia de San Juan Bautista del Lomo, que corrieron a cargo del párroco don Zoilo Pablo de Herrera y Cruz, recibiendo a continuación sepultura en el cementerio de dicha parroquia. Continuaba viudo de doña Bárbara Petra de Llarena, con quien no había tenido sucesión. (Octavio Rodríguez Delgado.) [blog.octaviordelgado.es]

Notas:
1 Sobre este personaje pueden verse también otros trabajos de este mismo autor: el artículo “Personajes del Sur (Arico-Fasnia): El teniente don Diego Antonio Estanislao Torres (1749-1832), promotor de la independencia de Fasnia”. El Día (La Prensa  del domingo), 12 de agosto de 1990; y el libro “Fasnia.  La gestación  de un pueblo. Independencia municipal (1795) y parroquial  (1796)”, publicado en 1999 por el Ayuntamiento de Fasnia. Con posterioridad, la reseña biográfica se ha visto enriquecida con nuevos datos.
2 La documentación sobre su carrera militar se ha extraído del Archivo Regional Militar de Canarias (Milicias), del Archivo Municipal de La Laguna (Milicias) y de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife (Fondo Rodríguez Moure).
3 Archivo Parroquial de San Joaquín de Fasnia. Libro de fábrica de la primitiva ermita. Hoy depositado en el Archivo Diocesano de Tenerife.
4 Archivo Municipal de Fasnia. Primer libro de oficios del Ayuntamiento.
5 Archivo Parroquial de San Joaquín de Fasnia. Primer libro de la fábrica parroquial. Hoy depositado en el Archivo Diocesano de Tenerife.
6 Ibidem.
7 Ibidem.
8  Se trata de un error, pues fue el 1 de mayo de 1796, después del poder del 6 de diciembre del año




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