ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA INVASIÓN Y OCUPACIÓN DEL
ARCHIPIÉLAGO CANARIO POR LOS EJÉCITOS ESPAÑOLES A PARTIR DE 1402.
Guayre Adarguma Anez Ram n Yghasen.
1320. Probablemente entre 1320 y 1339, el genovés Lancelloto Malocello,
por cuenta de los portugueses, arribó a las costas de Titoreygatra (Lanzarote),
isla a la que seguramente dio su nombre. Aparece en documentos como Nossa
Senhora de França. Tenía intención conquistadora, construyó un pequeño fuerte y
permaneció varias décadas. La empresa fracasó debido a que fue expulsado por
los majoreros. En algunos mapas figuró la isla con el dibujo de una banderola
genovesa.
1341. Alfonso IV de Portugal envió una expedición al mando del
florentino Angiolino de Teggia con el propósito de recoger información de las
Canarias. Se ha conservado una interesante relación de este viaje que hizo uno
de sus pilotos, llamado Nicolasso de Recco. Su heterogénea tripulación estaba
compuesta por genoveses, florentinos, castellanos y portugueses. Llevaban pertrechos
para conquistar una ciudad, planes que revelan el escaso conocimiento que
tenían acerca de los pobladores. La expedición avistó todo el archipiélago y se
decidió no establecer un asentamiento por falta de atractivos comerciales. Las
islas Canarias se pusieron de moda en los círculos culturales europeos y,
especialmente en Avignon.
1344 noviembre 15. El papa
de la secta católica Clemente Vl mediante la bula Tue devotionis sinceritas
con el fin de que este las conquistara y ayudara económicamente a al Vaticano
con una renta anual concede el reino de Canarias a Luís de la Cerda, también llamado Luís de España (Francia 1291 –
Lamotte 5 de julio de 1348), fue el primer conde de Talmon en 1338 y de
Clermon, almirante de Francia (1340-1341), señor de Deza y Enciso.
1393. Se asociaron en Sevilla algunos aventureros andaluces y otros
aventureros de las provincias de Vizcaya y Guipúzcoa, quienes, con licencia del
rey Enrique III, aprestaron una escuadra de cinco navíos, a las órdenes de
Gonzalo Peraza Martel, señor de Almonaster. Después de haber recorrido las
costas del continente y varias islas saquearon las humildes poblaciones de
Titoreygatra (Lanzarote) robando sus ganados y apresando al rey Tinguafaya con
la reina su esposa y otros 170 isleños que nunca cobraron la libertad pues
fueron vendidos como esclavos.
1402. Jean de
Bethencourt y su socio Gadifer de Lasalle parten de La Rochela para Cadiz el 1 de
mayo de 1402 con doscientos ochenta franceses, a los cuales se unen otros
aventureros castellanos. Tras hacer
frente a un motín de la tropa y marinos quienes reclamaban los salarios
atrasados de meses, Bethencourt consigue contentarlos pagándoles parte de los
mismos gracias a un préstamo concedido por un tío suyo, tras robar un ancla y
un esquife a un capitán inglés, prosiguen viaje a Lanzarote a donde llegan a
fines de junio. Con ellos van de capellanes los miembros de la secta católica
Juan Leverrier, presbítero, y Fray Pedro Boutier (no Bonthier), O.S.B. (no
O.F.M.). Bethencourt y Gadifer se apoderan de Titoreygatra (Lanzarote);
edifican, un fuerte en Rubicón (Lanzarote) y Bethencourt, por falta de
recursos, vuelve a Castilla y a Francia (con un cargamento de esclavos
guanches), a gestionar ayudas, dejando a Gadifer como gobernador en la isla y a
Berthin de Berneval como comandante del fuerte (Hist., I, 17; BAE, XCV,
65a-b). (Las Casas)
1403 Noviembre 28. Según una bula de Clemente VI, la titularidad
de la invasión y conquista de las Islas Las Canarias, pertenece a los reyes de
Castilla, y haciendo uso de su supuesto derecho, Enrique IV expide una Real
Cédula, que confirma al pirata Juan de Bethencourt señor feudal de Canarias y
vasallo del rey castellano.
1403. Gadifer de La Salle, pirata normando socio
del también pirata Jean de Bethencourt, desembarca en la isla de la Gomera capturando como
esclavos a cuatro gomeros. En un nuevo intento de desembarco son rechazados.
1403. Bethencourt navega hacia España con un cargamento de esclavos
majoreros en busca de ayuda. Presta homenaje de las islas a Enrique III, rey de
Castilla. Mientras tanto, Bertín de Berneval, encargado del gobierno colonial
político y militar, quien colabora con otros piratas en la captura de esclavos
maxoreros.
« ¿Qué gente la de Europa?—se
decían los majoreros—. ¿Qué fe, qué religión puede ser la suya, si al
tiempo que nos hacen elogios de su santidad, son traidores para con nosotros y
fraudulentos para consigo mismo?...».
Así surgen las hostilidades
contra los franceses. El majorero Asche se alía con los franceses en
maquinaciones contra el rey Guadarfía. Es quemado Asche y Gadifer de la Salle se decide matar a
todos los majoreros, excepto mujeres y niños. “Hasta de Dios disponga otra
cosas”.
1403. El pirata
normando Jean de Bethencourt gestiona ante Enrique III (no ante Juan II que, dice
el Padre Las Casas) su supuesto señorío de Canarias y pide ayuda; y recurre al
Papa Benedicto XIII, en Avignon, para pedirle también ayuda material y
espiritual: indulgencias y privilegios de cruzada y la creación de un obispado
en el fuerte de Rubicón. (Las Casas).
1404. Regresa Bethencourt a Titoreygatra (Lanzarote). Se somete el
rey Guadarfía y se bautiza con los demás majoreros. Enfrentamiento entre los
piratas Gadifer de la Salle
y Jean de Bethencourt por haber rendido éste vasallaje al rey de Castilla.
Bethencourt construye el fuerte de Rico‑Roque; Gadifer, el castillo de Val‑Tarajal.
Aumentan las desavenencias entre ambos.
1404. Expedición de Gadifer
a Gran Canaria. Desembarca en Arguineguín. Los canarii que en un principio
actúan en son de paz, reaccionan belicosamente ante las pretensiones de
sometimiento por parte del pirata. Gadifer vuelve a Fuerteventura.
1403. Benahuare
(La Palma) Garehagua (S.XV-XVI). La
temprana invasión y conquista de la isla de Eseró (El Hierro, 1402), llevada a
cabo por los piratas Jean de Bethencourt y Gadifer de La Salle, la convierte en una
excelente plataforma desde donde alcanzar con relativa facilidad las costas de
Benahuare (La Palma),
tanto para comerciar con los awuaras como para hacerlos objeto de este comercio.
1404. Juan de
Bethencourt, vuelto a las islas a principios de 1404, (con un grupo de colonos
franceses entre ellos un buen numero de prostitutas) logra poner paces entre
los suyos y somete a los maxos (que se habían rebelado) el 27 de febrero de
1.404. Intenta conquistar la isla Erbania (Fuerteventura) e incluso Tamarant
(Gran Canaria), pero no lo logra. (Las Casas).
1404.
Los invasores
y colonos organizan un tercio denominado Arqueros Lanzaroteños: pasados algunos
años se formaron dos compañías con moriscos y convertidos y en 1482 reinando
los Reyes Católicos, se organizó el segundo cuerpo militar con criollos del país.
1405. Juan de
Bethencourt, a principios de 1405, logra invadir y apoderarse de Erbania
(Fuerteventura). El 31 de enero deja de lugarteniente suyo a Juan de Courtois y
se va a Francia, de donde vuelve el 9 de mayo con más soldados y colonos; y
entre sus acompañantes se halla su sobrino Maciot {Menaute) de Bethencourt. El
6 de octubre intenta conquistar Tamarant (Gran Canaria) y posteriormente
Benahuare (La Palma);
pero fracasa y conquista la isla que él mismo llama «1le de Fer» Esero (isla de
Hierro), cautiva 111 guanches (incluido el rey de la isla) y los distribuye
como esclavos entre sus acompañantes.
1405 octubre. Expedición del pirata Jean de Bethencourt a Gran Canaria Desembarcan en
Arguineguín, mostrando, primeramente, una actitud pacífica para luego atacar.
El contraataque de los canarii derrota a los mercenarios expulsándolos de la
isla.
1405. Después de la
derrota en Tamarant (Gran Canaria) el pirata Jean de Bethencourt sigue la ruta
de Benahuare (La Palma.)
Ante la resistencia de los awuaras
frente a los piratas, prosigue hacia la isla Ecero (El Hierro.) Augeron,
hermano del rey Armiche, transmite a éste las promesas del invasor
conquistador. Armiche las acepta, pero no se cumplen por parte de los
piratas y Armiche es tomado como esclavo
junto con otros bimbaches.
1406. Se sublevan los naturales de Ecero (El Hierro) contra los
invasores colonizadores por los abusos cometidos que llegaban a las violaciones
públicas de sus mujeres e hijas. Maciot manda desde Titoreygatra un nuevo
gobernador y se ejecutan a algunos mercenarios. Maciot se convierte en un
tirano reyezuelo y llega hasta poseer un harén de esclavos en su choza-palacio.
1418. Pedro Barba de
Campos es enviado por la reina regente de Castilla con tres navíos a las islas
para tomarlas y con poder de la reina regente, trata con Maciot que éste le
venda las islas, el cual se las vende con poder de su tío el pirata Juan de
Bethencourt (Ibid., p. 76b); menos Titoreygatra (Lanzarote).
1418. Enrique de
Guzmán, conde de Niebla, vasallo de Castilla, en noviembre de 1418 (después de
la muerte de la reina regente), adquiere supuestos derechos sobre las islas
(Ibid.); menos Titoreygatra (Lanzarote).
1420. El rey Juan II
de Castilla, por Real Provisión, de Avila, a 29 de agosto de 1420, da en fuero
real a Alfonso de Casaus (o de las Casas) las islas de Tamarant (Gran Canaria),
(Tenerife), Gomera y Benahuare (La
Palma) para que las invada y conquiste «a Dios y al rey»;
“donación” que es confirmada por el jefe de los católicos el Papa Martín V por
bula del 2 de mayo de 1421.
1420. El rey
castellano Juan II cede a favor de Alfonso de Las Casas los supuestos derechos de conquista sobre las
islas no dominadas en el Archipiélago Canario, que eran Tamaránt (Gran
Canaria), Benahuare (La Palma),
Chinech (Tenerife) y Gomera, no es un suceso casual sino que corresponde aun
criterio político bien meditado, una vez que se consideró agotada la vía
abierta en 1402 por los piratas Juan de Bethencourt y Gadifer de La Salle, e inadecuada la
cesión total de la empresa isleña a un gran noble como era el conde de Niebla.
La merced hecha por Juan II, respaldada en los tiempos que siguieron por su
privado Álvaro de Luna, era una intervención nueva, indirecta pero efectiva, de
la monarquía castellana en la rapiña de las islas.
1424. Hernando de
Castro (padre de don Álvaro de Castro), conde de Monsanto, vasallo de Portugal
(quien había ido de embajador a Castilla en 1.423 a pregonar la tregua
de paces), enviado por el infante don Enrique el Navegante (quien estaba
intentando que sus pilotos sobrepasasen el cabo de Bojador y no lo consegian),
va con una gran armada de 2.500 hombres de a pie y 120 a caballo a las Islas
Canarias para conquistar Tamaránt (Gran Canaria) e imponer el bautizo
católico a los guanches; pero no pudo
sostenerla por los grandes gastos y tuvo que retirarse con la mayor parte de la
armada (Hist. I, 18; BAE, XCV, 67b y 68b). . (Las Casas)
1425. Expedición de
exploración y saqueo portuguesa a las Islas Canarias. Fernando de Castro con
sus tropas portuguesas se adentran en la isla en un intento de conquista,
siendo sitiados en Argodey por los gomeros.
1425. El rey Juan II
de Castilla protesta ante el rey Juan I de Portugal de la acción del infante
don Enrique. Se inicia así el pleito de estos reinos europeos ante el papado
por la supremacía en la depredación en las Islas Canarias.
1427.
Otra expedición portuguesa a las Islas Canarias.
1430. Deseando
solventar la guerra constante, que enfrentaba a las coronas de la Península Ibérica,
en torno a la tierra del oro, el Papa Martín V dio a la corona de Castilla las
Canarias, incluyendo Benahuare (San Miguel de la Palma), única que producía
pastel y caña dulce, según Bernáldez, quedando el resto del reino Fez, a
Portugal, con Madeira, "Desyerto" y Porto Santo. (L.Al. Toledo)
1430. Guillén de las
Casas adquiere el señorío de las islas
(menos Titoreygatra (Lanzarote): Tamaránt (Gran Canaria) y Gomera eran ya suyas
por herencia; Chinech (Tenerife) y
Benahuare (La Palma),
las adquiere de su hermano; Fuerteventura y Hierro, de Enrique de Guzmán. y
pone de lugarteniente suyo a Fernán Peraza.
“La ocupación
de Gomera por los europeos no ocurrió ni antes de 1434 ni después de 1445, y el
primer señor europeo de Gomera fue Hernán Peraza el Viejo.”(D.J. Wölfel 1990)
1434. El infante
Enrique de Portugal apeló al Papa Eugenio IV para obtener el derecho de
conquista en las islas habitadas por paganos, y consiguió una bula pontificia a
su favor.
1436. El rey
Duarte de Portugal, mediante sus embajadores enviados al Concilio de Basilea,
suplica al Papa Eugenio IV, en Bolonia, en agosto de 1436, que limite la
prohibición de la bula anterior a las islas Canarias habitadas por cristianos y
le faculte para conquistar las otras habitadas por infieles y adueñarse de
ellas con el fin de convertirlos a la fe (como ya había comenzado a hacerlo el
infante) y civilizarlos a los infieles de Canarias los describe la súplica al
Papa así: «Has [insulas] indomiti silvestres fere homines inhabitant qui nulla
religione coagulati, nullisque denique legum vinculis irretiti, civili
conversatione neglecta, in paganitate veluti pecudes vitam agunt» y dice
después que son «ferocitate quadam inmanes». Este es, pues, el concepto que,
incluso el Papa -debido a tal información- tenía de los indígenas canarios.
Estamos ante el antecedente inmediato de lo que se dirá de los indios de
América: que eran infrahombres, bestias parlantes.
1436. Llega a las
costas de la isla de La Gomera
la flota portuguesa encabezada por Tavilla, Picanço y González Atayde, con el
fin de reclutar guerreros para asaltar en razzia esclavista la isla Benahuare (La Palma.)
1444. El capitán
Lanzarote, volviendo de Arguim, de donde traía muchos cautivos, pasando por
Gomera, va a La Palma
y cautiva a 17 pastores indígenas; después, al volver a Gomera para dejar a los
indígenas de ahí que le habían ayudado, cautivó otros.
(Hist., I, 19; BAE, XCV, 78a).
1447.
Se produce el primer intento por parte de los invasores europeos establecidos
en Titoreygatra (Lanzarote) de
conquistar militarmente Benahuare (La
Palma), en la expedición comandada por los Peraza. La campaña acaba en un estrepitoso
fracaso, cuyo resultado más célebre es la muerte de Guillén Peraza el joven durante una
escaramuza en Tihuya.
1448. Fernán Peraza va pactado con algunos cantones la isla
Ghumara (La Gomera.) Desde allí sale
una expedición de invasión y conquista hacia la isla de La Palma, capitaneada por su
hijo Guillén que muere en el intento.
1449? El infante de
Portugal don Enrique el Navegante intenta sojuzgar las islas Canarias, incluso
Titoreygatra (Lanzarote) y Gomera, ocupadas por colonos castellanos, y cautivar
a éstos (Ibid., 69b).
1449. Los colonos
Fernán Peraza y Guillén, su hijo, consiguieron mediante pactos establecerse en la Gomera y, construyeron la
denominada Torre del Conde en Ipalam
(San Sebastián), en previsión contra las esporádicas revueltas de los
gomeros, que solían alentar los portugueses, especialmente interesados en la
isla. También consiguieron el dominio total sobre Esero (El Hierro), al parecer
con la ayuda del vasco Juan Machín de Arteaga, que había vivido antes en
Madeira y casó con una hija del rey
bimbache (herreño).
1451. Fernán Valermón,
Pedro Álvares {criado de Rui Galván), Vicente Días y otros vecinos de Lagos,
Rui Gonzales {hijo de Juan Gonzales) y otros vecinos de Madeira y de Lisboa,
por mandato del infante don Enrique el Navegante, van con cinco carabelas a
Titoreygatra (Lanzarote) para apoderarse de ella. No lo consiguen, pero hacen
depredaciones en otras islas y llevan presos a algunos colonos castellanos, en
Erbania (Fuerteventura) a Juan Iñiguez (Hist., I, 18; BAE, XCV, 70b).
1451. Con motivo de la
boda de su hermana Leonor con el emperador Federico III, el rey portugués
Alfonso incluyó entre los festejos la presencia de indígenas canarios: «Después vinieron unos
hombre salvajes, que viven en algún rincón del mundo, en unas islas lejanas del
mar, pero bajo señorío del señor rey de Portugal, diciendo haber sido enviados
por sus jefes a estas bodas, e hicieron a su manera unos bailes muy
particulares y dignos de admiración. Que aquella primera aparición en una Corte
europea del «buen salvaje» roussoniano haya correspondido a indígenas canarios
nada tiene de extraño, pero Portugal estaba más interesado en Guinea, y en 1454
renunció a su presencia en Titoreygatra (Lanzarote) y a su respaldo a los
gomeros, mientras que Castilla, cuyos negociadores habían sido el propio duque
de Medina Sidonia y el licenciado Juan Alfonso de Burgos, aceptaban el
monopolio lusitano en la navegación hacia Guinea. Alfonso V se apresuró a
obtener una bula pontificia que lo asegurase: es la «Romanus Pontifex», de 8 de
enero de 1455, donde se reconocía el derecho exclusivo de Portugal para navegar
y conquistar al S. del cabo Bojador.
1452. Muerte del invasor colono
Fernán Peraza (el viejo). Hereda su hija, Inés Peraza, casada con Diego
de Herrera. Establecen su residencia en Teguise (Lanzarote). Inocia acciones de
represalia contra los naturales alzados
de Erbania ( Fuerteventura.)
1452. Los colonos afincados en Titeroygatra (Lanzarote) hacen
incursiones a Chinech (Tenerife) en busca de ganado y esclavos. Es capturado un
muchacho mientras cogía peces en un charco. Se le bautiza en Titeroygatra
(Lanzarote) con el nombre de Antón el Guanche. El servirá luego de
intermediario de los invasores y de intérprete del significado de la imagen de la Diosa Chaxiraxi
(Candelaria).
1454 de Septiembre 28. La corona de
las españas otorga a los colonos
Diego de Herrera y doña Inés Peraza el señorío de Titoreygatra (Lanzarote), en su política de pleno dominio del
Archipiélago como base permanente desde donde penetrar al continente para
saquearlo, extrayendo oro, esclavos y especias. Los habitantes de la isla tanto
los colonos europeos como sus naturales estaban molestos con la tiranía del
esclavista Diego de Herrera y comenzó un motín. Los amotinados hicieron
prisionera la tripulación de una carabela portuguesa dedicada a la trata de
esclavos, la cual una vez liberada por Herrera fue vital en la sofocación de la
revuelta.
1455. El Papa Nicolás
V, en la bula Romanus pontifex, de Roma a 8 de enero de 1455, concede a
Portugal el derecho a conquistar por la costa de nuestro continente hacia el
sur sólo a partir de los cabos Bojador y Nam (Marruecos, por tanto, queda
fuera) ya defender el monopolio de su imperio marítimo ya conseguido. Parece
que don Enrique ha desistido de adueñarse de las islas de Titoreygatra
(Lanzarote) y Gomera, después de la negativa de Juan II de Castilla en 1454,
aunque la bula no hace alusión alguna a las Canarias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario