Podemos en Canarias: Análisis objetivo y desapasionado II

Relata Viera y Clavijo una anécdota que causa risa y ganas de llorar por lo que tiene de fondo. Cuenta que la esposa de cierto Capitán General, tenía ciertas dificultades al andar de una de sus piernas, de la cual “cojeaba”. La anécdota es que “las conejas de la alta sociedad tinerfeña”, teniendo miedo de quedar como “provincianas ignorantes”, no le preguntaron el motivo de que “andara de aquella manera”, sino que interpretaron que “era la moda en las cortes europeas, por lo que en todas las reuniones sociales, fiestas y demás, las buenas señoras andaban cojeando como si en efecto lo fueran de nacimiento o por accidente”.

Es este un claro ejemplo del mal que ha afectado siempre a los canarios, que adoptan sin pensar cualquier cosa que venga de fuera al tiempo que desprecian lo propio, porque esa es la educación que se les ha inculcado, que lo único que sirve es lo que viene de españistán y lo autóctono es de menor calidad o simplemente inferior. Se ha hecho desde el mismo momento de la conquista con el fin de acabar por erradicar todo lo nuestro, todo lo guanche; Y continúa en la actualidad, mientras valiosos retazos de nuestra Cultura tradicional y de la que surgió después de la conquista se pierden definitivamente, se nos trata de vender algo totalmente ajeno a esta Tierra. No es que uno esté en contra de que quien quiera tenga la costumbre o celebre lo que le dé la gana, no se trata de eso. Se trata de que mientras celebran o practican la costumbre que sea, “exista la mala costumbre” de unos en desprestigiar y despreciar las cosas y costumbres propias, y de otros en apoyarlas y estimular las foráneas al tiempo que desprecian las autóctonas. Y no, no es algo que suceda porque seamos unos bichos raros, esto mismo ha afectado y afecta a muchos pueblos, a todos los que han tenido la desgracia de ser colonizados por países extranjeros. Todos han pasado por las mismas circunstancias y solo han empezado a salir de ese pozo de inmundicias con la Descolonización e Independencia, que les ha hecho recuperar su “Orgullo Nacional”, violentado y acallado durante la etapa colonial.

En la primera parte de este artículo [Podemos en Canarias: Análisis objetivo y desapasionado I], dejaba claro que Podemos, para Canarias significa continuismo de lo español, pues de un partido español se trata, de un partido nacionalista español y que se enorgullece de ser español, según afirman sus propios portavoces. Sin que a mí me moleste que ellos se sientan orgullosos de ser lo que crean y quieran ser, que para eso cada uno es libre de elegir, si quiero reiterar, como ya dije, que para Canarias esto significa “continuismo” y nada más. Continuar con las mismas políticas de siempre, continuar con la misma situación injusta que hasta el momento, continuar con la misma incomprensión y el mismo estilo y forma de considerarnos, continuar con el despojo de todo lo nuestro para llevárselo a españistán. Continuar con la dependencia, de ser un País medio subvencionado porque se nos impide crecer al tiempo que se nos echan en cara esas subvenciones, intentando que creamos que sin ellos nos moriríamos de hambre.

Yo puedo entender a quienes al igual que todos los que hemos bebido de la “fuente leninista y guevarista”, ven la oportunidad de asaltar “el palacio de invierno del PPSOE” apoyando a Podemos. Pero aún sabiendo que los votos de Canarias “suman” y que se contabilizan para desbancar el bipartidismo y por tanto “debilitar españistán”, deben ser conscientes que nuestra situación no cambia aunque cambie el administrador colonial.

Aún, puestos en el caso de una “maniobra de infiltración o asalto al sistema” al rebufo de Podemos, es decir, usarlos como trampolín, sin una base organizativa real, con los pies hundidos “en la realidad cotidiana colonial canaria”, esa iniciativa fracasará, porque además, el partido español Podemos, pondrá los intereses españoles por encima de los intereses canarios siempre. Y tras el fracaso, ¿Qué les queda, el PPSOE o la retirada de la vida política activa?

Yo creo, que “quemar las naves” [Algo por lo demás muy español], para que no sirva de nada, es un ejercicio de simpleza política más que de oportunismo. Si algo puede enseñar Podemos, son dos cosas fundamentales de las que deberíamos tomar nota y reflexionar:

a- Todo régimen, al nacer lo hace ya con el germen de su propia autodestrucción, debido a sus contradicciones internas.

b- Es posible vencer cualquier régimen, solo es cuestión de saber crear y modular un discurso capaz de llegar a la mayoría desfavorecida del Pueblo para que este reaccione y acabe con él. Y ahí está el camino y es posible.

La alternativa, ya la he venido expresando reiterativamente desde hace tiempo; este Pueblo solo será fuerte, solo encontrará la solución a sus problemas endémicos, con una Organización Propia que aplique soluciones específicas a la especificidad canaria. Y por especificidades canarias, no me refiero precisamente “ni a la insularidad ni a la lejanía de españistán”, sino a nuestro “estatus de dependencia”. Dependencia legal, alimenticia, energética, presupuestaria, administrativa... y en un recorrido de unos 3000 Kms., no solo hay demasiados “intermediarios, mediadores y conseguidores”, sino que las cosas “se ven de otra forma distinta”, porque tomar decisiones a esa distancia es fácil sobre todo si los afectados “no son cercanos y además no pueden ir a reclamar”.

Fortalecernos en casa, dar la batalla aquí, porque aquí tenemos la oportunidad de ser mayoría, allá no. Allá los intereses de Canarias solo se limitan a lo que siempre se han limitado, expoliarnos. Sin embargo aquí, siendo mayoría, tenemos el poder necesario, primero para emprender un programa urgente de recuperación social de Nuestro Pueblo, en lo referente a trabajo, condiciones de vida y protección social, segundo una planificación objetiva a medio y largo plazo para alcanzar la soberanía energética y alimentaria, y una campaña de educación masiva sobre “la canariedad y los canarios”, sobre nuestra “realidad histórica, desmitificando y separando todos los tópicos con que nos han contaminado”.

Articular una organización o una organización de organizaciones no parece ser tarea fácil en la actualidad, y sin embargo ese debe ser el primer, principal y más importante objetivo a corto plazo para todos los que nos llamamos independentistas.

Está bien “sentirse” independentista, tener a flor de piel, en el alma y el corazón todo aquello que es nuestro y nos representa y defenderlo; Solo se puede defender a ultranza aquello que se Ama, pero también hay que ser independentista con la inteligencia, no podemos quedarnos solo en la parte “sentimental”, tenemos que ser consecuentes con nuestros sentimientos o no seremos nosotros mismos, sino simples caricaturas folclóricas como CC. Pero más tontos todavía, porque al menos ellos fueron capaces de dotarse de una organización que les ha permitido perdurar en el tiempo, por sus intereses personales, por lo que sea, pero “como tenían esos intereses comunes, se dejaron de boberías y se organizaron”.

Nosotros tenemos también unos intereses comunes, creo. ¿O no?
A mí personalmente me da igual el nombre o el tipo de organización que sea, aquella que represente la Unidad [Al menos] de Acción de todos nosotros. Lo mismo de quienes tengan el Honor de representarla pública e institucionalmente llegado el caso. Mientras cumplan los requisitos de representar a todas las “sensibilidades independentistas, incluidas las que a mí no me gustaran [Caso de que hubiera alguna], y su funcionamiento fuera estrictamente democrático, y siempre se antepusiera el interés general de la Patria o Matria y el Pueblo, todo lo demás, para mí es secundario y por lo tanto no será obstáculo para las cosas importantes de verdad.

En todo caso, como dice la canción, “[...] aunque sea agrio, es nuestro vino...”, o lo que es lo mismo, aunque no sea perfecta, será “nuestra organización, la del Pueblo Canario”. Lo demás, son solo modas extranjeras que pasarán como todas las precedentes...

Desde la Vieja Fortaleza, Rukaden Ait Anaga.

28 Noviembre 2014