CARTA DE UN CANARIO A LOS REYES MAGOS

Queridos Reyes Magos de Oriente:

Quiero hacerles varias peticiones con la sana intención de ver cumplidos mis sueños lo antes posible. Les pido perdón de antemano por abusar de su confianza. Sé que muchas de mis peticiones bordean casi lo imposible, pero ese es precisamente el motivo por el que me dirijo a ustedes y no a las Autoridades canarias -que sería lo lógico-, porque sé que pueden hacer realidad los sueños más increíbles, así que sin más preámbulo paso a enumerar mis deseos para este Día de Reyes:

1º Quiero poder disfrutar en la cesta de la compra de productos canarios. Cuando voy a las tiendas y supermercado sólo encuentro productos peninsulares y extranjeros, mientras compruebo como agricultores y ganaderos canarios se ven abocados al abandono de sus tierras y explotaciones ante la falta de apoyo institucional.
2º Quiero que esta industria turística que tantos millones genera en mi tierra revierta en los canarios, generando puestos de trabajo y creando unas sinergias con los agricultores, ganaderos y otros sectores que hasta ahora parece que no se han explorado lo suficiente a la vista de los índices tan alarmantes de paro.

3º Quiero que las instituciones canarias dejen de pelearse entre si y luchen para lo que realmente fueron nombradas, para gestionar adecuadamente nuestros impuestos y recursos públicos. Que ningún político canario, sea del partido político que sea, permita que se agreda a nuestra tierra y a los canarios -en el Parlamento Canario o en el del Estado- con actuaciones claramente perjudiciales para Canarias.

4º Que no se realice ninguna explotación de los recursos naturales de Canarias en contra del criterio de los canarios, del medio de vida y subsistencia de los canarios, y de los propios recursos naturales y el medio ambiente. Que lo que es malo para determinadas zonas de España no puede ser bueno para Canarias. Que el interés particular de determinadas compañías y políticos no prime sobre el interés general de Canarias.
5º Que las condiciones geográficas y climatológicas que de forma natural disfrutamos en este archipiélago puedan ser aprovechadas para generar la tan ansiada soberanía energética, que es a la vez generadora de desarrollo industrial y puestos de trabajo.
6º Que cada uno de nosotros seamos capaces de pensar en lo global (o cambiamos, o las generaciones venideras no tendrán opción de disfrutar de este planeta tal y como lo conocemos) y actuar en lo local; poniendo cada uno su granito de arena en su pequeña o gran parcela de influencia. Todos, políticos y ciudadanos en general. Pensar que este mundo no nos pertenece, estamos de paso y tenemos la obligación de cuidarlo para generaciones venideras. Que el dinero no lo es todo, que las personas valemos más que las cosas, y que hay que poner ciertos límites a los que ejercen su poder sin el más mínimo recato ni respeto a las personas y a esta tierra canaria.

7º Que las Autoridades, especialmente las más próximas al ciudadano, sean conscientes de su responsabilidad, que han sido elegidos para gestionar adecuadamente los recursos públicos, y que el día de mañana sólo serán recordados por su honorabilidad y su buena gestión en el aprovechamiento de los dineros públicos que los ciudadanos aportamos religiosamente con nuestros impuestos. Que todos somos iguales, independientemente de donde residamos dentro de cada municipio, porque todos contribuimos por igual al erario público.

8º Que los canarios terminemos de abrir los ojos de una vez por todas y seamos conscientes de nuestro potencial como pueblo, que no tenemos motivos para estar acomplejados ante nadie, que no debemos nada a nadie, que si nos lo proponemos somos suficientemente fuertes para acometer la empresa que nos propongamos -por dura que esta pueda parecer-, que nos merecemos un respeto como pueblo y, quien no nos respete no merece ser respetado. Debemos ser capaces de elegir a los dirigentes que nos lleven a la consecución de las mejores metas. Lideres capaces de defender nuestra dignidad como pueblo.

Queridos Reyes, espero no haber sido demasiado ambicioso con mi carta y que los canarios seamos merecedores, ahora si, de esos parabienes que solicito, ya que esta tierra lleva muchos años siendo receptora de carbón; Instituciones de carbón, dirigentes de carbón, y porqué no decirlo, ciudadanos de carbón. Todos debemos entonar el “mea culpa” en la nefasta gestión de los intereses canarios.

Este buen clima, esta buena tierra y esta buena gente no tiene sentido si no conseguimos que sus habitantes disfruten de una BUENA CALIDAD DE VIDA.
Espero humildemente recibir noticias positivas de Sus Majestades de Oriente y ver cumplidos mis sueños. (Maestro Pancho).

Maria Gómez Díaz

Enero de 2014