No seré yo quien defienda la
Constitución espanola de 1978 o cualquier otra, pero de momento, nos guste o no
es el texto legal de referencia, el que se encargan de aplicarnos a rajatabla,
y que mientras no tengamos uno nuestro, es lo que hay, como lo ha sido en todas
las colonias antes de independizarse y descolonizarse.
Solo desde este punto de vista,
desde esa constitución ya es ilegal el sistema electoral canario, pues esta es
tajante, un ciudadano un voto, igual al del resto de los ciudadanos, que
también son iguales en Derechos y Deberes; Y aunque la propia norma autorice a
legislar para “compensar lo que hubiere que compensar [Si lo hubiere]”, no lo
hace hasta el punto de que esa regulación legal vaya en contra de la Norma
Fundamental [La Constitución], cuyo Rango Normativo es Superior a lo que
pueda legislar cualquier gobierno en solitario. Y mientras no se pongan de
acuerdo PP y PSOE para cambiar esa Ordenanza
Constitucional es así; Y si no fíjense en el cambio que introdujeron para que
el pago de la supuesta deuda estuviese primero que los Derechos Sociales, que
tuvieron que ponerse de acuerdo las ¾ partes de la Cámara [Creo recordar], y
luego someter el cambio a Referéndum Popular, cosa que no han hecho [Por lo que
estarían actuando de forma ilegal en este sentido] Otra cosa muy distinta es
conseguir un dictamen jurídico que lo confirme.
Este sistema, fue impuesto en
Canarias para garantizar que las cosas
cambiaran aparentemente para que no cambiaran en realidad, pues fue la
dictadura que ansiaba metamorfosearse quien designó a los actores que debían
ponerse de acuerdo: “las llamadas fuerzas vivas y de orden de las islas”, mediante un reparto de poder que venía a
integrar el antiguo cacicato insular en la estructura electoral de los nuevos
partidos “de masas” ¿Cómo? Sencillamente dándole más valor a los votos de unos
pocos canarios que a los del resto. En la actualidad, quienes han heredado o se
han hecho acreedores de sustituir a los antiguos caciques, aunque militen en
grandes partidos, allí ejercen el control/ chantaje de su estatus caciquil, da
igual a qué partido pertenezca, hecho que se revela en la frase de los supuestos “equilibrios insulares”, situación
que define en realidad a los “equilibrios políticos” que deben hacerse en los
aparatos a la hora del reparto de puestos y prebendas y en el momento de la
confección de candidaturas; A nada más, y si no que alguien me diga de que le
ha servido a “las islas menores” ese supuesto “Equilibrio Territorial” con el
que se justifica este sistema electoral ¿De qué les han servido las
“agrupaciones independientes de ...” o los PIL y demás...?
La Democracia o es demócrata o no
es Democracia. Un ciudadano un voto, igual al del resto de Ciudadanos. Pero no
es solo este aspecto el que hay que sustituir. Cambiar algo corrupto heredado
de algo también corrupto no se puede cambiar, hay que sustituirlo. Buscar un mecanismo que se adapte a la
realidad actual de las islas, incluida su realidad geográfica y por tanto
humana, no es tarea fácil dentro del actual ordenamiento jurídico pues no
tenemos capacidad real de cambio legal, pero dentro de este “estrecho margen”,
si pueden introducirse algunos cambios.
No solo es el sistema electoral;
También es preciso “tocar” los Cabildos Insulares, pues son una Institución
antigua y que carece de sentido práctico en su actual Concepción. Si se
conservaran, deberían transformarse en un Órgano Colegiado de Alcaldes y no un
lugar “donde colocar a los amigos y la familia”. Un Órgano con competencias
reales en todos los asuntos y materias que afecten a la ciudadanía de cada
Isla, por lo que el Gobierno de Canarias debería descentralizar sus
Competencias lo más posible, reservándose el Derecho de Diseñar las Políticas
Generales, pero serían los Cabildos los que las aplicarían en cada Isla
mediante el Consenso de sus Alcaldes o sus Delegados.
Lo que no puede consentirse por
más tiempo es la situación actual de falsa representación y por tanto de
desgobierno o gobierno ilegítimo que han protagonizado algunos personajes en
nuestra breve historieta moderna, en el que un sistema electoral ilegítimo ha
promovido a la “vida política” a personajes que de otro modo no habrían llegado
a ser más que, si acaso, alcaldes o concejales. Una caterva de mediocridad que
responde a intereses personales y personalistas de unos y de los aparatos
políticos estatales, y que lejos de hacer una Canarias prospera y Socialmente
Justa, está sumiéndonos en una situación de atraso, miseria y dependencia
extrema, incapaz de responder a los Intereses Generales de Nuestro Pueblo,
porque ni fue diseñado para eso, ni representa de verdad a nuestro Pueblo, ni
son los Intereses Generales de Nuestro Pueblo, sino los de unos pocos, los que
se barajan y discuten en los Cabildos y el Parlamiento de Canarias. No necesita
reformarse, necesita abolirse.
Desde la Vieja
Fortaleza, Rukaden Ayt Anaga.
5 Junio 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario