Habia una frase que deciá...cuando muere un
anciano se cierra un libro Puede que sea una frase muy rotunda o incluso
fatalista, pero es una realidad que se nos está escapando de las manos. Con
nuestros mayores se nos van sus historias, que son las historias de sociedad la
historia del pueblo. es por ello que debemos recuperar estas historias, la de
de nuestros mayores, de los que nos rodean y los que nos quedan lejos. No olvidemos que la historia de un pueblo la
hacen sus habitantes, las que cuenta de generación en generación, las vivencias
familiares y sociales, todas ellas unidas, a la del pueblo.
Se puede recuperar esa historia, partiendo desde
nuestro entorno .Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas
pequeñas, puede cambiar el mundo.. Si iniciamos Iniciemos estos pasos podemos
recuperar la historia de nuestra familia, y con ello salvar una parte esencial
de la historia de nuestro pueblo.
La muerte destruye nuestras últimas bibliotecas vivas del saber. La voluntad de rescatar (¿qué significa exactamente la expresión?, ¿con qué razones?, ¿con qué fines?, ¿con qué medios?) y de mantener o recuperar la memoria del tiempo pasado por medio de los ancianos. Cada anciano que muere es un libro abierto que se cierra.
Maria Gómez Díaz.
Marzo de 2015.
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