Topónimo aborigen con el quHoya de Pineda.
e se
conoce un pequeño caserío situado en la carretera que sube de Las Cruces -
Caideros (GC-220), después de pasar la entrada al caserío de
Es topónimo también existente en
la isla de Tenerife y puede tener su origen en el paralelismo toponímico entre
el África bereber y las islas.
Ya decía Abreu y Galindo: «… También me da a entender hayan venido de África, ver los muchos vocablos en que se encuentran los naturales destas islas con las tres naciones que había en aquellas partes africanas, que son berberiscos y azanegues y alárabes. Porque Telde, que es la más antigua población de esta isla de Canaria, y Gomera, y Orotava en Tenerife, son nombres que se hallan en el reino de Fez y Benamarín.
Y en Cabo de Aguer están unas
huertas que llaman las huertas de Telde, no muchas leguas distante de la ciudad
de Tegaste, donde estuvo enterrado el cuerpo de San Agustín, en la cual
huerta está una casa pequeña con una puerta chica entre unas tapias, y unas
parras de almuñécar junto a una acequia de agua, con que se riegan muchas
huertas. Y dentro de esta casa, en la pared, está el sepulcro de San Agustín,
en la pared frontera como se entra por la puerta, con una losa negra encima. La
cual capilla, aunque es poseída de infieles, es por ellos venerada para
conservarla y no deshacerla, según me informé de personas que tratan en
aquellas partes.
Esta ciudad de Tegaste está
tres leguas del mar y cercana a Fuerteventura y junto al monte Atlas, en las
faldas dél, por donde descienden muchos ríos y arroyos. Hay unos pueblos que
llaman de este nombre Telde, de manera que en los nombres propios parece
conformar y en muchos vocablos apelativos, los de estas islas con los
africanos. Y dello se puede colegir qué nación haya venido a cada isla,
conforme a la consonancia de los vocablos…» (Historia de la conquista de
las siete islas de Canaria, Sta. Cruz de Tenerife, 1977)
En la actualidad se considera
certera esta hipótesis de Abreu y Galindo en cuanto al paralelismo entre los
topónimos bereberes y los aborígenes canarios, si bien contiene algunos leves
errores. El mencionado Cabo de Aguer, no es otra que la antigua Santa Cruz de
Aguer hoy llamada Agadir, ciudad de Marruecos. Pero en cuanto al topónimo
marroquí, el allí localizado es Tigueust, y el más próximo a la voz que
incluye es Tagaste que se localiza en Argelia lugar de nacimiento de San
Agustín de Hipona.
Aclarado este particular, aunque
el pequeño caserío está conformado en la actualidad de un moderno asentamiento,
contanddo con algunas cuevas de usos habitacionales o para usos agro-ganaderos,
se encuentra en el entorno de un asentamiento troglodita aborigen del que han
quedado las casas-cueva de La
Degollada junto a la Hoya de Pineda,
con muchos aprovechamientos posteriores vinculados al centro locero, así como
el conjunto de cuevas del Tirior, ya en la jurisdicción de Sta. Maria de
Guía, pues el barranco de la
Boticaria o del Alguacilejo es la divisoria entre
ambos municipios.
El caserío de Tegueste se
asienta en la ladera meridional del Coronado, pequeño edificio volcánico
separado de El Cabezo de la
Montaña de Guía precisamente por La Degollada
originada por la caldereta de la Hoya
de Pineda, todos en un sustrato volcánico donde los tubos o cuevas fueron
aprovechados en el pasado. Es válido suponer que este caserío correspondió
igualmente a un asentamiento aborigen.
« A su
regreso de Colombia, durante la guerra civil, en 1938, Pérez de Barradas pasó
tres meses en Las Palmas y estudió directamente las colecciones de El Museo
Canario.
Resultado de este trabajo es la publicación de su Estado actual de las investigaciones prehistóricas sobe Canarias (1939), que aunque breve, es el primer intento serio de un prehistoriador español por acercarse al mundo arqueológico canario. Las consideraciones más importantes apuntadas por Pérez de Barradas podrían resumirse así: (...) 6. La segunda oleada correspondería a la «cultura de las cuevas», procedente del norte de Africa, y serían los proto-guanches. El arribo de estas gentes lo sitúa alrededor del 2.500 a. de J. C.» (MARTIN DE GUZMÁN, C.: Las culturas prehistóricas de Gran Canaria, Madrid, 1984).
Resultado de este trabajo es la publicación de su Estado actual de las investigaciones prehistóricas sobe Canarias (1939), que aunque breve, es el primer intento serio de un prehistoriador español por acercarse al mundo arqueológico canario. Las consideraciones más importantes apuntadas por Pérez de Barradas podrían resumirse así: (...) 6. La segunda oleada correspondería a la «cultura de las cuevas», procedente del norte de Africa, y serían los proto-guanches. El arribo de estas gentes lo sitúa alrededor del 2.500 a. de J. C.» (MARTIN DE GUZMÁN, C.: Las culturas prehistóricas de Gran Canaria, Madrid, 1984).
Las últimas
investigaciones sobre el topónimo Tegueste, y en particular el
grancanario, nos hablan de su posible origen en la deportación de guanches de
Tenerife a Gran Canaria, información que nos aproxima a la mejor comprensión de
del topónimo en sus varias localizaciones en las islas de Tenerife, El Hierro,
Gran Canaria, Lanzarote y La
Gomera , así como su amplia distribución en la geografía
bereber del Norte de África:
«...El caso de Gran Canaria es
muy interesante, ya que podemos constatar cómo se conserva la forma argelina o
marroquí de TAGASTE,
así como la forma tinerfeña de TEGUESTE.
En el municipio de Tejeda podemos encontrar las denominaciones de “Umbría de
Tagaste”, haciendo alusión a la orientación del terreno y también en la
misma zona como “Hoya de Tagaste”, se encuentran a 750 m. de altitud y
respondería al topónimo más antiguo. Frente a éstos, en Gran Canaria existe
otro topónimo, de similitud morfológica idéntica a nuestro, Tegueste,
que se encuentra en Gáldar, muy cerca de la Hoya de Pineda.
Para el historiador Gabriel
Betancor Quintana, el topónimo Tegueste, así como otro muy próximo, la Hoya del Guanche, están vinculados
a la presencia de guanches de Tenerife, deportados y obligados a asentarse en
ese territorio. Así Gabriel Betancor comenta: “(…) de los avecindados en
Gran Canaria: Francisco de Güimar, Sebastián de Anaga, Juan de Tegueste….; o de
las familias de canarios Juan Grande, Luis Pérez, Pedro González, Juan
Maninidra, Francisco de Santiago (…) en sus asentamientos de Guayadeque,
Tasautejo, Hoya de Pineda, Agaete, Guayedra, Tamagada, Lugarejos(….).
Por tanto debemos situar el origen del topónimo a finales del s. XV. En el Archivo Histórico Provincial de Las Palmas, nos encontramos en la documentación existente, a Juan de Tegueste, como vecino de Gáldar en 1526 y ante el escribano Alonso San Clemente, otorgando junto a otros vecinos poder a Francisco Jaimez, para que se oponga a la segregación del lugar de Santa María de Guía de la villa de Gáldar » (RODRÍGUEZ RODRÍGUEZ, T.: El topónimo Tegueste y sus distintas acepciones, Inédito, 2012).
Puede avalar esta teoría la
comparecencia de Juan de Tegueste en el poder otorgado el 24 de octubre de 1526
por una amplia nómina de vecinos significativos de Gáldar, a favor del
escribano y convecino Francisco Jaimez de Sotomayor, para pleitear contra la
decisión del gobernador de la isla Martín Fernández de Cerón de crear una
alcaldía real para el lugar de Guía que hasta ese momento se integraba en
Gáldar. Sobre este vecino se dice «Juan de Tegueste, guanche de Tenerife,
donde hubo un don Juan de Tegueste, probable pariente del Mencey de dicha
localidad. Pudiera ser el mismo» (BONNET
SUÁREZ, S.: "La villa de Gáldar en 1526", El Museo Canario,
nº 73, 1960).
(Humberto Pérez)