lunes, 1 de julio de 2013

MARTIN FIERRO VII VI





Vamos dentrando recién A la parte más sentida, Aunque es todita mi vida De males una cadena:
935    A cada alma dolorida
Le gusta cantar sus penas.
Se empezó en aquel entonces A rejuntar caballada Y riunir la milicada
940    Teniéndola en el cantón, Para una despedición "* A sorprender a la indiada.
Nos anunciaban que iríamos Sin carretas ni bagages
945    A golpiar a los salvages
En sus mesmas tolderías ™; Que a la güelta pagarían, Licenciándolo al gauchaje.
Que en esta despedición
950    Tuviéramos la esperanza, Que iva a venir sin tardanza, Sigún el jefe contó, Un menistro, o qué sé yo, Que lo llamaban Don Ganza *a.
955    Que iba a riunir el ejército Y tuitos los batallones, Y que traiba unos cañones Con más rayas que un cotín **. ¡Pucha!, las conversaciones
960    Por allá, no tenían fin.


Pero esas trampas no enriedan A los zorros de mi laya; Que esa Ganza m venga o vaya, Poco le importa a un matrero:

965 Yo también dejé las rayas2M... En los libros del pulpero.
Nunca jul gaucho dormido; Siempre pronto, siempre listo, Yo soy un hombre, jqué Cristo!,
970    Que nada me ha aeobardao, Y siempre salí parao En los trances que me he visto.
Dende chiquito gané La vida con mi trabajo,
975    Y aunque siempre estuve abajo Y no sé lo que es subir, También el mucho sufrir Suele cansarnos ¡barajo!
En medio de mi inorancia
980    Conozco que nada valgo: Soy la liebre o soy el galgo Asigún los tiempos andan; Pero también los que mandan Debieran cuidarnos algo.
985    Una noche que riunidos Estaban en la carpeta Empinando una limeta01 El gef e y el juez de paz, Yo no quise aguardar más,
990    Y me hice humo m en un sotreta.
Para mi el campo son flores Dende que libre me veo; Donde me lleva el deseo Allí mis pasos dirijo,
995    Y hasta en las sombras, de fijo Que a donde quiera rumbeo.

Entro y salgo del peligro Sin que me espante el estrago, No aflojo al primer amago

1000    Ni jamás fí gaucho lerdo;
Soy pa rumbiar como el cerdo Y pronto cal a mi pago.
Volvía al cabo de tres años De tanto sufrir al ñudo,
1005    Resertor, pobre y desnudo, A procurar suerte nueva; Y lo mesmo que el peludo *" Enderesé pa mi cueva.
No hallé ni rastro del rancho; 1010    ¡Sólo estaba la tapera!
¡Por Cristo, si aquello era pa enlutar el corazón. Yo juré en esa ocasión Ser más malo que una fiera!
1015     ¡Quién no sentirá lo mesmo Cuando ansí padece tanto! Puedo asigurar que el llanto Como una mujer largué. ¡Ay, mi Dios, si me quedé
1020    Más triste que Jueves Santo!
Sólo se oiban los aullidos De un gato que se salvó; El pobre se guareció Cerca, en una vizcachera **;
1025    Venia como si supiera Que estaba de güelta yo.
Al dirme dejé la hacienda, Que era todito mi haber; Pronto debíanlos volver,
1030    Según el juez prometía, Y hasta entonces cuidaría De los bienes la mujer.
Después me contó un vecino Que el campo se lo pidieron, La hacienda se la vendieron Fa pagar arrendamientos, Y qué sé yo cuántos cuentos; Pero todo lo tundieron.
Los pobrecitos muchachos, Entre tantas afliciones Se conchavaron de piones; Mas ¡qué ivan a trabajar, Si eran como los pichones Sin acabar de emplumar!
Por ahí andarán sufriendo De nuestra suerte el rigor: Me han contado que el mayor Nunca dejaba a su hermano; Puede ser que algún cristiano Los recoja por favor.
]Y la pobre mi mujer Dios sabe cuánto sufrió! Me dicen que se voló Con no sé qué gavilán: Sin duda a buscar el pan Que no podía darle yo.
No es raro que a uno le falte Lo que a algún otro le sobre: Si no le quedó ni un cobre *", Sino de hijos un enjambre, ¿Qué más iba a hacer la pobre Para no morirse de hambre?
¡Tal vez no te vuelva a ver, Prenda de mi corazón! Dios te dé su protección, Ya que no me la dio a mí. Y a mis hijos dende aquí Les echo mi bendición.
Como hijitos de la cuna *
1070    Andaban por ahí sin madre; Ya se quedaron sin padre, Y ansí la suerte los deja Sin naides que los proteja Y sin perro que los ladre "*.
1075    Los pobrecitos tal vez
No tengan ande abrigarse, Ni ramada ande ganarse M, Ni un rincón ande meterse, Ni camisa que ponerse,
1080    Ni poncho con que taparse.
Tal vez los verán sufrir Sin tenerles compasión; Puede que alguna ocasión, Aunque los vean tiritando,
1085    Los echen de algún jogón
Pa que no estén estorbando.
Y al verse ansina espantaos *" ** Como se espanta a los perros, irán los hijos de Herró
1090    Con la cola entre las piernas A buscar almas más tiernas O esconderse en algún cerro.
Mas también en este juego Voy a pedir mi volada "':
1095    A naides te debo nada, Ni pido cuartel ni doy, Y ninguno dende hoy Ha de llevarme en la armada1B.
Yo he sido manso primero 1100    Y seré gaucho matrero
En mi triste circunstancia, Aunque es mi mal tan projundo, Nací y me he criao en estancia, Pero ya conozco el mundo.

ra le conozco sus mañas, ^conozco sus cucañas2", Jé cómo hacen la partida, 'ja. enriendan y la manejas, Desaceré la madeja, \unque me cueste la vida.
y aguante el que no se anime A meterse en tanto engorro si no aprétese él gorro *"
 para otra tierra emigre; Pero yo ando como el tigre Que le roban los cachorros.
Aunque muchos eren qué el gaucho Tiene un alma de reyuno **, No se encontrará ninguno Que no lo dueblen las penas; Mas no debe aflojar uno Mientras hay sangre en las venas.






No hay comentarios:

Publicar un comentario