Debemos recordar que los hechos narrados en torno al secuestro y cautividad de Abenchara que explican la posterior “captación diplomática” de Tenesor (Joaquín Blanco dixit) y sus dos primeros viajes a la península, tuvieron un precedente mejor conocido: el rapto de la guayarmina Tenesoya y su canje posterior, para recuperarla, por un numeroso grupo de rehenes cristianos, hechos que cantaran Cairasco de Figueroa en octavas reales en el siglo XVI y Néstor Álamo en prosa poética en el siglo XX. Esto nos lleva a pensar que la captura de las guayarminas era un objetivo premeditado de las fuerzas invasoras conscientes del papel esencial que jugaban las reinas en la legitimación del poder.
Pero esta vez es el propio guadarteme Tenesor Semidán quien se ofrece a sí mismo en sacrificio de rendición para recuperar a su mujer y su legitimidad como rey lo que dota de una justificable debilidad humana a personaje tan controvertido y coloca en insostenible situación a los métodos de la conquista castellana que frecuentan el rapto y la extorsión como fórmula de ablandamiento de sus contrincantes. En este caso
hablamos de una estratagema urdida para forzar la conquista de Gran Canaria utilizando como rehenes a una mujer y a una niña recién nacida. Ni la crueldad inherente a los tiempos de las guerras de “reconquista” ni el fanático cristianismo de los reyes, para quienes los nativos no serían más que unos bárbaros infieles, permiten dar amparo a tamaña iniquidad histórica.
En cuanto a los presuntos viajes de la segunda mitad de la década de lo ochentaantes de la incorporación de la compañía canaria al ejercito castellano que conquista las islas de
guerra de Granada (1482-1491), teniéndose constancia de la presencia de Tenesor en el Real de Málaga en el verano de 1487 donde fue recibido por los reyes. Asimismo se tiene constancia de otra visita a la corte en fecha indeterminada a la que acude en compañía de sus hijas que no creemos que sea coincidente en el tiempo con el encuentro antes citado y que puede estar en relación con la nueva esclavitud de Abenchara, ahora llamada Juana Hernández. una relectura de la biografía realizada en 1921 por José Rodríguez Moure sobre nuestro personaje nos da pistas relevantes acerca de las andanzas de Tenesor por tierras andaluzas durante la guerra de Granada. Se trata de unas notas extraídas de unos documentos de 1556, que se conservan en el archivo del Museo Canario bajo el título de Proceso contra Don Rodrigo de Acuña.
Dichos documentos publicados por
“...consta del dicho don Fernando, abuelo del dicho don Bernardino de Carvajal, haber sido rey y señor de esta isla de Canaria y haberse venido de su libre voluntad a tornar cristiano y haber servido a los Católicos Reyes de gloriosa memoria con gente suya y a su costa en la conquista del reino de Granada de donde sus altezas lo tornaron a enviar a esta isla en su servicio el cual lo hizo como tan buen vasallo que fue principal
parte para que esta isla se acabase de ganar y lo mismo las de Tenerife y La Palma...”
(F. H. B.). Publicado por Maria Gómez Díaz. Agosto de 2014.
Me encanta esta lectura, se lo agradezco. Tengo mucho que aprender.
ResponderEliminarSinceramente, no creo acertada la conclusión que se hace de que el que Tenesor se entregase fuese un demostrativo de debilidad o egoismo y menos como se da a entender que se entregó para salvaguardar sus derechos de guanarteme de la isla por la legitimidad que le ofrece ABENCHARA.
ResponderEliminarNo hay más que leer el gran respeto que le tenían los canarios a su vuelta, respeto que hubiera perdido puesto que volvió sin la reina aún rehén de los católicos. Además de que él por mucho que mandase no se hubiera atrevido a enfrentarse al sabor, a todos los guayres y a los faycanes. No tiene lógica y la historia siempre tiene que tener una lógica en los acontecimientos.
Hay un dato que se escapa siempre en la historia de la conquista, a Calatayud no fue Tenesor, luego entonces como sí fue otro guanarteme éste tiene que haber sido el Telde con algunos guayres y nobles. Y no volvieron...
Esto aclara bastante el panorama porque la situación la veo como sigue:
1- llegada de Pedro de Vera e inicio de guerra total como hizo Weyler en Cuba, sangre, fuego y tierra quemada
2- Muerte de Doramas con el consiguiente desanimo en las tropas canarias y especialmente en las de Telde
3- Los de Telde negocian la rendición con Pedro de Vera y éste accede y envía una delegación de teldenses a la corte que estaba en Calatayud. Una vez entrevistados con los reyes pactan la rendición. Como los canarios no sabían mentir, al preguntarles fernando si podían rendir toda la isla contestan que no que es Tenesor el que tiene mayores fuerzas para luchar y que es a él al que sigue mayor parte de la gente. El rey da instrucciones y antes de volver Pedro de Vera los apresa y los mantiene como rehenes en la península.
4- Tenesor se entera de todos los tejemanejes de los teldenses,
5- Fabricación de la torre de agaete
6- llegada de los gomeros de Hernán Peraza, la guerra se traslada al interior de la isla donde antes podían estar en paz, ya no queda refugio
7- Toma de Abenchara que embarazada y herida es trasportada a la corte de Córdoba
8- Reuniones del Sabor y decisión de pactar, probablemente Pedro Chemida y Juan Mayor que eran amigos de Tenesor fueron los que lo organizaron y seguramente para asegurarse de no caer en manos del hijoputa de Pedro de Vera lo habrán hecho con Alonso de Lugo y con el Obispo Juan de Frias
No hubo traición a su pueblo, si después de estar en la corte y ver el poder de la nación más poderosa del mundo hubiera seguido la guerra o se hubiera desentendido de su pueblo hoy en día la sangre canaria hubiera desaparecido extinta, sin embargo no hay canario que tenga abuelos canarios que no sea descendiente de cualquiera de las ramas de la familia real guanartémica o de los menceyes de tenerife y de La Palma...