lunes, 20 de enero de 2014

CAPÍTULO XLIV-IV




EFEMERIDES CANARIAS
UNA HISTORIA RESUMIDA DE CANARIAS
PERÍODO COLONIAL, DÉCADA 1831-1840

CAPÍTULO XLIV-IV



Eduardo Pedro García Rodríguez


1832. Fallece el criollo  Teniente Coronel del ejército de la metrópoli,  José Hernández Bautista, esposo de Andrea Oramas Bautista. Fue capitán del Regimiento Privincial de Garachico y Caballero de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo. Por su fortuna y posición ejerció gran influencia en la vida local, de la que fue Alcalde Real en tres ocasiones. Construyó para su vivienda la casa alta de estilo neoclásico situada en la plaza de la iglesia.

1832 Enero 6.
El Beagle, navío a bordo del cual viajaba el naturalista inglés Charle Darwin, deja caer sus áncoras en la bahía de Añazu (Santa Cruz) en la isla Chinech (Tenerife)
Darwin nace el 12 de febrero de 1809 en Shrewsbury, era el quinto hijo. Darwin era alto, delgado, cabeza bien conformada, ojos pardos, frente amplia, de mirada franca y amistosa. Se sentía llamado a entrar en la iglesia anglicana como cura rural, aunque tenía interés en la historia natural.
Su padre, Robert, era médico y realizó una magnífica labor. De carácter autoritario, su madre murió cuando él tenía 8 años de edad. Su abuelo era el doctor Erasmus Darwin, el cual trabajó sobre la idea de la evolución, aunque no llegó a ninguna conclusión.
En 1825 pasa a la Universidad de Edimburgo a estudiar medicina, aunque la abandonó y también su carrera eclesiástica.
Se le ofrece un puesto de naturalista llamado el Beagle, con la oposición de su padre, el 5 de septiembre de 1831 se encuentra en Londres con el Capitán Robert Fritzroy, para dar un viaje alrededor del mundo. Darwin asumiría el puesto de naturalista.
El 27 de diciembre de 1831 zarpó el Beagle del Puerto de Plymouth con un Darwin que se mareaba y no podía comer.
Un autor que había influido mucho en él fue el naturalita Humboldt y su obra "Narración Personal"; en ella se hacen largas descripciones de la isla de Tenerife. Humboldt había visitado Tenerife en 1799; Darwin soñaba con las Islas Canarias: "en la actualidad, hablo, pienso y sueño con ir a las Islas Canarias; yo estoy aprendiendo español. Estoy seguro de que nadie nos impedirá ver el árbol del Gran Dragón".
El día de reyes de 1832, Darwin tiene a Canarias al alcance de su vista. El 6 de enero por la tarde, entraron en el Puerto de Santa Cruz, mientras él leía las páginas de Humboldt. Junto con él viajaba un pintor desconocido con el que hizo una gran amistad, Augusto Earle, que llegó a pintar en sus lienzos el paisaje que se le brindaba a sus ojos.
"En esos momentos un hombrecillo pálido nos informó que deberíamos guardar una estricta cuarentena de 12 días. En el barco se hizo un silencio sepulcral, hasta que el Capitán Fritzroy gritó: ¡Arriba el foque! y dejamos aquél lugar por el que tanto habíamos suspirado"
"Durante el día estuvimos entre Tenerife y Gran Canaria; la panorámica era magnífica. El Pico de Tenerife, visto entre las nubes, parecía otro mundo".
¿Qué había ocurrido? La causa eran los rumores que circulaban por Canarias de que en Inglaterra había una epidemia de Cólera. El Cólera Morbo Asiático aparece en 1830 y se extiende por los países del Volga y el Cáucaso, entrando en Polonia con el ejército Ruso, pasa a Moldavia y llega al Báltico para infestar a Inglaterra.. En Francia causó100 mil muertos.
El Beagle tomó rumbo a Cabo Verde para no retornar nunca más a Canarias, en un viaje que duró hasta 1836 y dio la vuelta al mundo.
De vuelta a Europa en 1837 empezó a reunir datos sobre la evolución de las especies. En 1839 publica su diario del viaje y en ese mismo año se casó con su prima Enma. Sus obras se vendían con gran éxito, pero se resistía a publicar su teoría sobre la Evolución, por la lucha que mantenía entre sus creencias bíblicas y su descubrimiento.
Tuvo que esperar a más de 20 años para publicar su teoría, para no enfrentarse a la sociedad de aquél tiempo.
De todos modos, Darwin mantuvo siempre un interés por las Islas Canarias. Para eso contaba con la colaboración del científico Charles Lyell, que visitaba con frecuencia, Tenerife, Gran Canaria, Lanzarote y La Palma, pera sus experiencias: Darwin era un ferviente lector de su obra para interesarse por Canarias. La familia Darwin y la de Lyell se visitaban y se carteaban.
Lyell le informaba de todo aquello que a Darwin le interesaba sobre Canarias.
Un estudioso de Darwin y de Lyell en Gran Canarias, fue el doctor Gregorio Chill Naranjo, fundador del Museo Canario, el cual abrazó la teoría de la evolución, publicándola en su obra, que obtuvo la excomunión, por ello del Obispo Urquinaona.
1832 enero 31.
En el siglo XIX figura la relación de cinco naufragios. En la noche del 31 de enero de 1832, la fragata inglesa Eclipse, al mando del capitán Davis, en viaje de Londres al Cabo de Buena Esperanza con un cargamento de objetos y efectos de valor, encalló en la costa de Garafía, en el lugar conocido como Fajana Grande, a causa de la espesa niebla que le impidió ver tierra. A pesar de los arrecifes y escarpes que existen en aquella costa, sólo pereció una persona, por haberse arrojado al agua precipitadamente. (Juan Carlos Díaz Lorenzo, 2010)
 1832 Mayo 16. Nace en Winiwuada n Tamaránt (Las Palmas de Gran Canaria) el criollo españolista, doctor y político Luís Navarro Pérez. Estudió la carrera de Medicina en Madrid (España), donde intervino frecuentemente en los movimientos sociales de la época en la metrópoli.
Después de la revolución en la metrópoli de 1864, iniciada en Vicálvaro, se trasladó a Madrid Laureano Hernández para activar el tema de la división “provincial” en la colonia de Canarias. A esta iniciativa se sumó el españolista Navarro Pérez publicando una serie de artículos en el periódico «La Discusión», dedicados a Tamaránt (Gran Canaria) simultaneando su profesión con la actividad política desde las filas del partido Canario. En esta etapa, continúa con sus artículos en la prensa local, escribiendo en El Imparcial y El Bombero. Más tarde ingresó en el partido Conservador que tenía como órgano de expresión el rotativo La Verdad. En 1872, la Diputación Provincial lo nombra médico del Hospital de San Martín y, a raíz de la Restauración, fue nombrado alcalde de la ciudad, cargo en el que permaneció poco tiempo, aunque nos dejó en su haber la reforma de la Plaza de Cairasco. Navarro Pérez también se dedicó a la docencia, dando clases en el Seminario Conciliar y Colegio de San Agustín, donde impartía las cátedras de Historia Universal y de España. Falleció el 14 de febrero de 1891.

1833. Existen fuertes tensiones que provocan que la capital de la colonia pase a Winiwuada (Las Palmas), pero solo al transcurrir seis meses esta capitalidad es recuperada por Añazu n Chinech (Santa Cruz de Tenerife). El rey español Fernando VII muere ese mismo año y le sucede en el trono su hija Isabel actuando de regente Mª Cristina.

En el año 1834 durante la regencia de Mª Cristina, se suprime la inquisición. En 1835 1936 y 1937 hay una fortísima emigración a Cuba, Puerto Rico y las jóvenes repúblicas americanas. El desgaste económico del estado que se produjo con motivo de las guerras carlistas para la sucesión en el trono de España condujo a que en 1837 comience un nuevo proceso de desamortización, la desamortización de Mendizábal.


1833 Febrero17. Nace en Guiniwada, Tamaránt  (Las Palmas de la Gran Canaria) Nicolás Estévanez y Murphy Político, escritor y militar, criollo y muerto exiliado en París el 21 de Agosto de 1914. A los quince años ingresó en el Colegio español Militar de Toledo, y al recibir en 1856 el empleo de oficial se incorporó al batallón de cazadores de las Navas, tomando parte el mismo año en los sucesos ocurridos en Madrid (Julio). Después de haber desempeñado algunos destinos en la Península Ibérica, fue destinado al contionente  en 1859, cuya campaña hizo con el regimiento de Zamora, asistiendo a 15 acciones y 2 batallas, en una de las cuales fue herido, por lo que ascendió a capitán y se le concedió la cruz de San Fernando. En 1863 se trasladó a Puerto Rico y de allí a los Estados Unidos, estudiando los episodios más salientes de la guerra de Secesión y publicando una interesante Memoria. Más tarde hizo la campaña de Santo Domingo, durante toda la cual mandó un batallón, aunque no era más que capitán. Tomó parte activa en la revolución de 1868 y en el movimiento federal de 1869, hasta que fue hecho prisionero en Béjar y encerrado en la cárcel, primero en Salamanca y después en Ciudad Rodrigo, recobrando la libertad al cabo de un año por haber sido comprendido en la amnistía de 1870, pero perdió su empleo en el ejército español. Representó a la ciudad de Salamanca en las Asambleas federales, fue profesor del Ateneo Militar, individuo del Directorio republicano con Orense, Pi, Figueras y Castelar, diputado por Madrid y reelegido por tres distritos para las Constituyentes, optando por su país natal. En Noviembre de 1872 inició un movimiento revolucionario en Andalucía, apoderándose de la ciudad de Linares y derrotando a la columna de Borrero. Al ser proclamada la República, después de haber renunciado el empleo de brigadier, fué nombrado gobernador de Madrid y sofocó varios movimientos antirrepublicanos, confiándosele más tarde la cartera de Guerra, en el desempeño de la cual se distinguió por su probidad y amor a las ideas liberales, ya que rechazó la proposición que le hicieron algunos elementos militares de proclamarse dictador. Al caer la primera República española, se refugió en Portugal, de donde fue expulsado a petición del Gobierno español, trasladándose entonces a París, donde fijó su residencia, y habiendo renunciado a su sueldo de ex ministro, hubo de vivir del producto de su pluma. Después de residir una temporada en Cuba, regresó de nuevo a París, y allí acabó sus días. Aparte de numerosas traducciones y otros trabajos de menos importancia publicó su Diccionario Militar, tenido en gran aprecio por los inteligentes, y unas curiosas Memorias autobiográficas, publicadas en El Imparcial de Madrid; Calandraca (1898), &c. Fue redactor de El Noticiero de España (1868) y colaboró en El Imparcial, El Descanso Dominical y Gente Vieja, de Madrid, y en El Diario de Tenerife y otros periódicos de Canarias. Usó en ocasiones el seudónimo de Estevanillo.

Uno de los poemas más sentidos de Nicolás Estévanez es el siguiente:

La patria es una peña,
la patria es una roca,
la patria es una fuente,
la patria es una senda y una choza.

Mi patria no es el mundo;
mi patria no es Europa;
mi patria es de un almendro
la dulce, fresca, inolvidable sombra.

A veces por el mundo
con mi dolor a solas
recuerdo de mi patria
las rosadas, espléndidas auroras.

A veces con delicia
mi corazón evoca,
mi almendro de la infancia,
de mi patria las peñas y las rocas.

Y olvido muchas veces
del mundo las zozobras,
pensando de las islas
en los montes, las playas y las olas.

A mí no me entusiasman
ridículas utópias,
ni hazañas infecundas
de la razón afrenta, y de la Historia.

Ni en los Estados pienso
que duran breves horas,

cual duran en la vida
de los mortales las mezquinas obras.

A mí no me conmueven
inútiles memorias,
de pueblos que pasaron
en épocas sangrientas y remotas.

La sangre de mis venas,
a mí no se me importa
que venga del Egipto
o de la razas célticas y godas.

Mi espíritu es isleño
como las patrias rocas,
y vivirá cual ellas
hasta que el mar inunde aquellas costas.

La patria es una fuente,
la patria es una roca,
la patria es una cumbre,
la patria es una senda y una choza.

La patria es el espíritu,
la patria es la memoria,
la patria es una cuna,
la patria es una ermita y una fosa.

Mi espíritu es isleño
como las patrias costas,
donde la mar se estrella
en espumas rompiéndose y en notas.

Mi patria es una isla,
mi patria es una roca,
mi espíritu es isleño
como los riscos donde vi la aurora.

1834. Es disuelta por la Metrópoli las milicias de la isla de Erbania (Fuerteventura) las cuaesl eran el sostén del control político y económico de los caciques europeos de isla bajo el mando de los denominados coroneles. Esta milicia había sido fundada en La Oliva en el siglo XVIII.

1833 Junio 28.
Se proclama el municipio de Icod como capital de la comarca.
El actual municipio de Icod de los Vinos formó parte del antiguo menceyato guanche del mismo nombre, Icod.
Una vez terminada la invasión y conquista en 1496, comenzó a recibir a los primeros pobladores castellanos y portugueses, que habían obtenido datas de tierra y agua y que se mezclaron con la población aborigen restante en la zona. El propio Adelantado, Alonso Fernández de Lugo, se reservó un importante terreno en el que levantó un ingenio azucarero en 1505 en el que empleaba tanto trabajadores libres como esclavos.
La riqueza de sus tierras y la abundante presencia de agua la consolidaron desde sus inicios como una comarca agrícola próspera que atraería por ello rápidamente muchos vecinos. El primer cultivo que pudo ser implantado dada la existencia de tan buenas condiciones en la zona fue la caña de azúcar. La llegada y la experiencia de la población portuguesa fue clave en ese despegue económico, como también su presencia se nota todavía en la toponimia de la zona.
La crisis del sector azucarero, pocas décadas después, obligó a un cambio en la actividad económica, que se giró hacia el cultivo de la viña. Incluso el propio Adelantado tuvo que dedicar a ello sus tierras a partir de 1542. Es desde entonces cuando el viñedo comenzó a cobrar protagonismo y a ser el principal motivo del rápido crecimiento poblacional y urbanístico de Icod. El auge del vino, como producto principal del cultivo de la vid, marcó el devenir de la zona hasta el último cuarto del siglo XVII. Empezó a conocerse a Icod desde entonces con el sobrenombre de “de los Vinos”.
El crecimiento poblacional que experimentó Icod fue progresivo y continuado, ayudándonos a entender la evolución social y económica ocurrida en ese tiempo. En 1506 la población era de 40 vecinos (unas 200 personas), pasando a tener 350 vecinos (unos 1750 habitantes) en 1585 y una población de 3006 personas en 1676, convirtiéndose en el cuarto núcleo de población más importante de la isla, por detrás de La Laguna (6683 hab.), de La Orotava (5782 hab.) y de Garachico. Sus calles comenzaron a albergar nuevos y suntuosos edificios, iglesias y conventos. En 1585 fueron los agustinos quienes emplazaron el primer convento, en 1630 se instalaron las monjas bernardas y en 1641 fue erigido el convento de los franciscanos. También la elite nobiliaria inició un proceso de vinculación de sus propiedades, consolidándolas mediante los mayorazgos, para evitar su disgregación a través de las herencias.
Con la crisis paulatina de las exportaciones de vino malvasía desde el último tercio del siglo XVII, la emigración a América pasó a ser una vía de escape para una parte de su población. El vino vidueño y el aguardiente de parra tenían una salida en las colonias inglesas de América del Norte y en las Indias españolas, mientras que la seda y el vidrio suponían un importante complemento a las exportaciones para la economía de Icod.
Numerosos icodenses emigraron a Indias, en su gran mayoría a Cuba y Venezuela, pero también a Yucatán y Santo Domingo. Una vez allí enviaron remesas de dinero y objetos de arte para ayudar a sus familias afectadas por la crisis. Algunos retornaron e hicieron negocios, invirtiendo sus ganancias en la localidad, ya sea en la agricultura, la construcción o simplemente para demostrar su lustre y su riqueza ante sus conciudadanos. Esto explica cómo, pese a la emigración y la crisis, se mantuvo la población e incluso se incrementó por encima de la de Garachico, más aún después de la erupción de 1706.
El siglo XVIII será para Icod un buen momento en su pugna con Garachico por conseguir la hegemonía política y judicial de la comarca de Daute. En 1776 su población ascendía a 4468 habitantes, muy por encima de las 1895 personas que residían en Garachico. Sólo el duro revés que supuso el incendio del 2 de mayo de 1798 podía hacer dudar de su progresión, pero ésta no se detuvo finalmente, pues en 1812 fue designado como cabeza de la comarca de Daute. No obstante, debido a los continuos cambios de régimen, no fue hasta el 28 de junio de 1833 cuando se proclamó definitivamente su capitalidad.
1833 Agosto 3. - Nace el doctor Domingo Fernández Cubas en Islas Canarias. Llega a Cuba en el año 1854 e ingresa en la Universidad de La Habana, obteniendo el título de Bachiller en Medicina en 1863 y el de Doctor en 1876. En octubre de 1871 se le nombra como profesor de Disección y Osteología. Defendió a sus alumnos de Medicina del primer año de la carrera frente a la injusta acusación de haber profanado la tumba del periodista español. Gonzalo Castañón, ese mismo año.
1833 Septiembre. Una fuerte corriente arrastró a un barco canario, al cual hundió en la boca del Puerto Mequínez, Chinech (Tenerife).

1834.
En el verano, aportaron a la isla de Lanzarote dos buques procedentes de Sevilla y Cádiz, en cuyas ciudades se padecía a la sazón el cólera morbus, y tampoco se introdujo este azote del cielo que tanto se ha generalizado en los diversos climas del mundo. Véase el suplemento al Boletín Oficial de Canarias N.° 20, de 16 de agosto de dicho año.  (J. Álvarez Rixo, 1982:85)


1834 Julio 15. Desde la metrópoli se ordena la supresión del Tribunal de la Inquisición.

Artículo 1º. Se declarar suprimido definitivamente el Tribunal de la Inquisición.

Art. 2º.  Los predios rusticos y urbanos, censos ú otros bienes, conque que le había dotado la piedad Soberana, ó cuya adquisicion le proporcionó, por medio de leyes dictadas para su proteccion, se adjudican á la estincion de la deuda pública.

Art. 3º. Las ciento una Canongías, que estaban agregadas á

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